Juana Ruiz fue detenida por el Ejército israelí el pasado 13 de abril en su casa de Beit Sahur, una población cristiana en las cercanías de Belén. Desde entonces permanece incomunicada y está siendo sometida a interrogatorios en la prisión militar de Ofer, evidentemente sin ninguna garantía judicial. Su situación se prolongará al menos hasta el próximo domingo, ya que los militares israelíes han ampliado hasta entonces la situación de incomunicación. Aunque no se descartan nuevas prórrogas. La legislación israelí permite a sus militares hacerlo casi ininterrumpidamente. Todo ello sin formular ninguna acusación, lo que incrementa la indefensión del detenido. Veinte soldados irrumpieron en su casa, intimidando a su marido y a su suegra.

Juana Ruiz Sánchez tiene 60 años y es de origen castellano. Lleva más de tres décadas en Palestina realizando tareas de trabajo humanitario en la ONG Health Work Committees (HWC). Está casada con un palestino y es conocida también como Juani Rishmawi, el apellido de su marido.

En este tiempo, ha mantenido relación con multitud de internacionalistas de todo el mundo cuando han viajado a Palestina. Entre ellas, decenas de brigadistas vascos. Poder conversar en castellano sobre cuestiones palestinas, siempre complejas, es un plus.

Como recuerda el manifiesto que reclama la liberación de Ruiz, HWC realiza decenas de proyectos sanitarios en la Palestina ocupada por el sionismo con el apoyo de la cooperación internacional. Esta ONG tiene catorce clínicas en las que realizan tareas de prevención sanitaria (vacunaciones, salud natal y prenatal, campañas de información y formación) a la que, de otra manera, la población palestina no tendría acceso.

La labor de HWC está en el punto de mira del ocupante sionista. Según un portavoz del Ejército israelí, se le acusa de «lavado de dinero» vinculado al FPLP, una de las formaciones históricas de la izquierda palestina, considerada «terrorista» por Israel y también por la UE y EEUU.

En el Estado español, existe el precedente de Ángeles Maestro, que fue investigada por la Audiencia Nacional acusada de recoger fondos en solidaridad con Palestina y entregárselos a Leila Khaled, histórica militante del FPLP.

Todo ello responde a una estrategia sionista de intentar ahogar la ayuda al pueblo palestino. Incluso la humanitaria. Ante ello, las organizaciones internacionalistas vascas han convocado para hoy concentraciones en Iruñea (tras un cambio de hora, finalmente serán a las 14.00 frente al CHN y 20.30 en la Plaza del Castillo) y Bilbo (18.30 en el Arenal).

Además, el Parlamento navarro ha aprobado en Junta de Portavoces una declaración institucional en la que se rechaza «el arresto sin acusación previa de la trabajadora humanitaria Juana Ruiz Sánchez por parte del Estado de Israel». La iniciativa ha sido llevada a ese foro directamente por la Presidencia de la Cámara.

Electos de EH Bildu, ERC, CUP, Podemos y Compromís, junto a internacionalistas, periodistas y representantes de colectivos de defensa de los derechos humanos han firmado el manifiesto a favor de la liberación de Ruiz.

Incluso el Gobierno español se ha dirigido al israelí para exigir que «mejoren las condiciones» de Ruiz.