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Iruñea

Laboral Kutxa se apunta a las previsiones «optimistas» sin soslayar los factores de riesgo

Laboral Kutxa considera que en 2022 acabará la crisis «en términos de producción». En consecuencia, ha presentado unas previsiones económicas «muy optimistas», elaboradas «sobre la base de la superación de la crisis sanitaria», aunque no descarta tener que revisarlas a la baja en diciembre.

Ibon Urgoiti, director de Desarrollo de Negocio de Laboral Kutxa, y Joseba Madariaga, director del Departamento de Estudios. (Laboral Kutxa)
Ibon Urgoiti, director de Desarrollo de Negocio de Laboral Kutxa, y Joseba Madariaga, director del Departamento de Estudios. (Laboral Kutxa)

Laboral Kutxa ha presentado este jueves sus informes anuales sobre la evolución económica en Nafarroa y la CAV en sendas comparecencias realizadas en Iruñea y Bilbo, en las que han tomado parte Joseba Madariaga, director del Departamento de Estudios, e Ibon Urgoiti, director de Desarrollo de Negocio.

Sobre el «año aciago» que hemos dejado atrás, han destacado, «sin olvidar el dolor causado» por la pandemia del covid, que esta crisis ha generado «la mayor contracción del PIB en varias décadas» a nivel global.

En cuanto a las previsiones, calcula que la economía navarra crecerá este año en torno a un 6,4% y, si no hay ningún nuevo escenario de estrés, en 2022 se situará entre el 6,5% y 7%, mientras que el PIB de la CAV aumentará un 6,3% este ejercicio y alrededor de un 6,8% en el siguiente. Por tanto, este escenario supondrá «el final de la crisis» derivada de la pandemia de covid-19.

No obstante, entre esas previsiones «muy optimistas» también aparecen signos de alerta debido a factores de riesgo como la efectividad de las vacunas contra las nuevas cepas del coronavirus, el endeudamiento público o los efectos reales que dejará la crisis en el tejido productivo y el empleo, lo que «se podrá calibrar a lo largo de los próximos trimestres».

Por ello, considera «muy relevantes» los fondos Next Generation, ya que «brindan una excelente oportunidad de cara a generar tejido productivo que permita modernizar la estructura económica».

El informe de Laboral Kutxa recoge la evolución de algunos índices macroeconómicos, como el producto interior bruto (PIB), en Hego Euskal Herria y el Estado español.

El debate sobre la inflación

Además, se apunta al riesgo de una inflación que, de convertirse en un alza sostenida de los precios, requerirá un cambio en la política del Banco Central Europeo (BCE).

En este sentido, Madariaga ha comentado que las tensiones que origina una demanda creciente se están haciendo notar ya en los precios de las materias primas, incluso en la escasez de determinados bienes que afectan a la industria, entre ellas a la del automóvil y a sectores relacionados con ella.

Según ha indicado, esto ha llevado a que se reabra el debate sobre la inflación y sus consecuencias en una fase aún temprana del ciclo de crecimiento postpandemia.

Ha manifestado que, en todo caso, puede ser una situación transitoria que, aunque afecta a la expansión del sector de la automoción, no obligará a cambiar la política monetaria, por lo que al menos hasta 2023 no ha barajado una subida de tipos.

Madariaga ha precisado que el informe de Laboral Kutxa calcula que la inflación crecerá en Nafarroa este año un 2,3%, y un 1,5% el próximo; en la CAV, las subidas serán del 2,1% y el 1,6% respectivamente.

Crecimiento también del empleo

Otros datos que ha aportado este panel de predicciones indican que el empleo crecerá en 2021 en Nafarroa un 4,2% y en la CAV un 4,3%, mientras que en 2022 lo hará en un 4,8% y un 5% respectivamente.

El año 2020 dejó una tasa de paro del 9,5% sobre la población activa en la CAV y del 10,1% en Nafarroa, según los datos de las oficinas de empleo.

«El avance en el proceso de vacunación unido a la eliminación de las limitaciones hace que poco a poco se recobre la normalidad y ello implica un escenario de crecimiento económico», ha incidido Urgoiti.