La austriaca Anna Kiesenhofer ha dado la gran sorpresa en la prueba de ciclismo en ruta femenina de los Juegos de Tokio al entrar en una escapada de salida y aprovechar la incomprensible táctica de la selección holandesa. Ninguna de sus cuatro corredoras ha querido trabajar hasta que faltaban solo quince kilómetros para lograr la medalla de plata con Annemiek van Vleuten, que creía que ganaba el oro en una imagen de la anárquica carrera de su selección, por delante de la italiana Elisa Longo Borghini, bronce.
Kiesenhofer ha sido la más fuerte de una escapada de cinco corredoras formada de salida con Plichta (Polonia), Shapira (Israel), Looser (Namibia) y Oberholzer (Sudáfrica) a la que han dejado alcanzar una renta de diez minutos y medio y ha sabido administrar sus fuerzas para lograr la victoria más importante de una carrera atípica.
Empezó a destacar en el ciclismo cuando se sacaba un doctorado de Matemáticas en la Universidad de Barcelona en 2016, lo que le permitió correr su único año como profesional UCI en carretera en el Lotto en 2017.
A partir de ahí se ha centrado en el triatlón y el duatlón. Esta temporada solo había competido en carretera en los dos campeonatos austriacos, sexta en línea y primera en la crono, pero el año pasado ya demostró su nivel al ser tercera en el duro Tour de Ardèche y lo ha confirmado al llegar en meta en solitario tras una carrera muy dura con 134 kilómetros, 2.700 metros de desnivel y mucho calor.
Una carrera descontrolada
La selección holandesa, con las cuatro grandes favoritas, ha dejado coger a la escapada diez minutos y medio cuando se entraban en los últimos 65 kilómetros y solo a partir de ese momento han empezado a lanzar ataques individuales.
A 55 de meta se ha marchado por delante Annemiek Van Vleuten, pero en la subida a Kagosaka Pass, que se coronaba a 40 de meta, Kiesenhofer se ha marchado por delante y la corredora del Movistar ha visto que sola no podía alcanzarla y ha sido atrapada por el pelotón.
Solo al entrar en los últimos quince kilómetros con cuatro minutos de desventaja han empezado a trabajar las holandesas para lograr la plata con Annemiek van Vleuten, mientras que Elisa Longo Borghini ha alcanzado la medalla de bronce.
Lo más sorprendente es que Van Vleuten ha celebrado su segundo puesto como si fuera el oro porque las holandesas no sabían que estaba por delante Anna Kiesenhofer, que ha llegado con apenas 1:15 de ventaja.
Ane Santesteban ha estado con las mejores en todo momento, pero ha acusado al final la dureza del recorrido y el calor sofocante con el que se ha disputado la carrera. Ha acabado 28ª a 3:19 y ha mejorado su actuación de Río 2016. Su compañera, la balear Mavi García, ha sido duodécima a 1:46 en un grupo en el que Marianne Vos ha logrado el quinto puesto y también ha entrado Anna van der Breggen.
Duelo Van der Poel-Pidcock
El programa ciclista de los Juegos de Tokio presenta este lunes una de sus citas más atractivas con la prueba de mountain bike masculina en la que destaca entre los favoritos la presencia de dos de los mejores especialistas de ciclocross y de las clásicas de carretera, Mathieu van der Poel y Tom Pidcock.
El holandés llega tras ganar una etapa y estar seis días de amarillo en el Tour antes de empezar a preparar la prueba de mountain bike y el inglés lleva más tiempo centrado en esta especialidad y en Japón para aclimatarse tras recuperarse de una fractura de clavícula.