La antena departamental de la Agencia Regional de Nueva Aquitania ha remitido con fecha de 12 de agosto a la Prefectura de Pirineos Atlánticos su informe actualizado sobre la evolución de la pandemia.
En ese informe las autoridades sanitarias constatan la fuerte presión hospitalaria y abogan por reforzar la vigilancia a fin de «volver a niveles de indicadores epidemiológicos controlables».
De ahí que, a la luz de los datos, globalmente algo mejores que la semana precedente, la ARS opte por mantener al departamento que incluye a Ipar Euskal Herria en el nivel de «alta vulnerabilidad» por covid-19.
La tasa de incidencia ha pasado de 222,7 casos por 100.000 a 219,8. A fecha de 12 de agosto se registraban, no obstante, 277,1 casos por 100.000 habitantes, lo que sitúa al departamento de Pirineos Atlánticos con una tasa de incidencia elevada. La tasa de posibilidad ha pasado de 4,7% a 5,5% en la última semana.
Con todo, la ARS ve signos de una incipiente estabilización y una ralentizacion en la circulación del virus especialmente constatable en la población de entre 10 y 19 años, la franja de edad más afectada por los nuevos contagios. Con todo en esa franja de edad la tasa de incidencia sigue siendo muy alta, aunque ha pasado de 611 por 100.00 habitantes de hace una semana a 531 en la actual.
Los indicadores hospitalarios siguen estables. A 12 de agosto había 52 pacientes hospitalizados y 17 en servicios de reanimacion en los hospitales del departamento. Las últimas cifras, aportadas el 5 de agosto, registraban 50 pacientes en servicios ordinarios y 16 en reanimación.
Ese aumento de hospitalizaciones obligó por primera vez desde el inicio de la pandemia al Hospital de Baiona a derivar pacientes a los hospitales de Pau y Akize (Dax).
El informe constata que ha bajado levemente el número de brotes, que pasa de los 17 registrados la semana precedente a 15. Esos cluster se concentran en centros de alojamiento y ocio, y en fiestas privadas y de empresa.
Reforzar la vigilancia
En los tres territorios de Ipar Euskal Herria incluidos en la Mancomunidad Vasca (311.876 habitantes) la tasa de incidencia ha pasado de 429,6 a 413,9 casos por 100.000 habitantes. La tasa de posibilidad ha bajado de 8,1% a 6,6% y han aumentado los test de 5.272 por cada 100.000 habitantes a 6.271.
Así las cosas, y aunque se constata una menor circulación viral el informe de la ARS, que sirve de base para las decisiones de la Prefectura, constata que el impacto hospitalario de la pandemia sigue siendo alto y aboga por «reforzar la vigilancia a fin de volver a niveles de indicadores epidemiológicos controlables».
De ahí que se mantenga la calificación de alta vulnerabilidad para el departamento del que forma parte Ipar Euskal Herria.