Los socialdemocratas (SPD), verdes y liberales (FPD) han acordado este viernes, 15 de octubre, dar comienzo a las negociaciones formales para formar un Gobierno, al que se define como «coalición semáforo».

Los líderes de los tres partidos, comenzando por Olaf Scholz, candidato socialdemócrata a la Cancillería, han acordado un texto conjunto que da por finalizada la ronda previa de conversaciones exploratorias con un «muy buen resultado», valora Scholz.

Por su parte, el líder de los liberales, Christian Lindner, ha señalado que la alianza entre los tres partidos representa una ocasión que no se puede desperdiciar: «El gran ganador de un acuerdo no será uno u otro partido sino el país».

Al principio, Lindner se mantenía escéptico ante la posibilidad de lograr un acuerdo con socialdemócratas y verdes debido a las diferencias programáticas entre los tres partidos, pero ha confesado estar «impresionado» por la forma como se han dado las conversaciones previas.

Las medidas propuestas para la cogobernanza de los tres partidos, se sostienen en tres pilares principales: el aumento del salario mínimo, el proceso de descarbonización y el compromiso de no incrementar los impuestos.

Para empezar, tanto el partido socialdemócrata como los verdes tenían la intención de subir el salario mínimo. De seguir adelante con el acuerdo, los alemanes pasarían de cobrar un mínimo de 9,60 euros a 12,0 euros la hora, cumpliendo así con el programa electoral de ambos partidos.

En cuanto a los verdes, su mayor exigencia ha sido dar comienzo a una revolución industrial ecológica. Por lo tanto, el acuerdo incluye un plan para terminar el proceso de descarbonización en Alemania para 2030, 8 años antes de la fecha límite establecida por la Unión Europea. Asimismo, el acuerdo contiene un plan de acción para la protección del clima. «Los tres partidos están en condiciones de impulsar el proyecto de modernización industrial más importante de los últimos 100 años», ha señalado Scholz en una comparecencia.

Para terminar, los liberales han aceptado el incremento del salario mínimo, a cambio de que verdes y socialdemócratas hayan cedido en otros puntos como el de no subir los impuestos e introducir un elemento de capitalización en el actual sistema de jubilaciones, que actualmente es un sistema de reparto.

Además, en el ámbito de la economía el texto preliminar plantea una ofensiva de inversiones y medidas dirigidas a aumentar la cohesión social.

El comienzo de las negociaciones deberá ser aprobado por diversos órganos de los tres partidos durante el fin de semana –la cúpula del SPD ya ha anunciado su visto bueno– y el lunes se prevé que se defina una agenda para los próximos meses. Así, Scholz ha adelantado que esperan tener un acuerdo de coalición definitivo antes de fin de año.