Aitor Agirrezabal
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad

Escocia indultará a los mineros 37 años después de las huelgas

El Gobierno escocés indultará a los más de 500 condenados durante las huelgas mineras de 1984 y 1985. El Ejecutivo destaca que con ello pretende «ayudar a la reconciliación y curar las heridas» en las comunidades mineras.

Imagen de las huelgas de 1984 en Escocia. (LABOUR)
Imagen de las huelgas de 1984 en Escocia. (LABOUR)

El Gobierno escocés ha publicado un nuevo proyecto de ley para indultar a los mineros condenados por delitos relacionados con las huelga en la década de 1980. El secretario de Justicia, Keith Brown, ha defendido que la legislación, «de alguna manera, ayudará a la reconciliación y a curar las heridas» en las comunidades mineras.

Durante aquellos días de 1984 y 1985, millones de personas protestaron en toda la isla contra el cierre de pozos durante la disputa laboral con el Gobierno de Margaret Thatcher. Cerca de 1.400 mineros fueron detenidos y más de 500 fueron condenados durante aquellas protestas en Escocia. Además de los castigos penales, una de las principales consecuencias que tuvo aquel conflicto fueron los antecedentes y la pérdida de empleo de cientos de familias escocesas, algo que ahora ya no se puede resolver, tal y como se han apresurado a recordar varios exmineros.

Ahora, el indulto también se aplicará a los condenados que hayan muerto desde entonces, pero no arroja dudas sobre las decisiones tomadas por los tribunales en ese momento y tampoco anula las condenas.

La huelga minera de 1984 a 1985 fue una huelga masiva que paralizó, en gran medida, la industria del carbón en todo el Reino Unido. Aquellas protestas y el resultado final supusieron un punto y aparte en las relaciones laborales de la isla. La derrota final de los huelguistas trajo consigo un debilitamiento significativo del movimiento sindical. Un golpe que se arrastra todavía hoy en día. Así como el distanciamiento entre los sectores populares escoceses y Londres. Frente a la derrota de la clase trabajadora, la victoria de la entonces primera ministra del país y líder del Partido Conservador, Margaret Thatcher, ‘La dama de hierro’.

La huelga comenzó el 6 de marzo de 1984 y tuvo un seguimiento por toda la isla de aproximadamente el 73%, destacando zonas como el sur de Gales, que llegó a tener al 99% de sus mineros en huelga. Finalizó el 3 de marzo de 1985, cuando todavía se mantenían en huelga el 60% de los mineros.

La Unión Nacional de Trabajadores Mineros (NUM), quien encabezó aquellos meses de movilización, fue creada en 1945, dos años antes de la masiva nacionalización de la industria del carbón. El fin de la huelga y la derrota minera permitió al Ejecutivo de Thatcher consolidar su programa neoliberal, que volvería a privatizar todo el sector en 1994. Un paso previo a la destrucción. En 1983, Gran Bretaña tenía 174 pozos de trabajo. Hoy no queda ninguno.

«Curar heridas»

El proyecto de ley sigue a una revisión independiente del impacto en las comunidades escocesas durante la huelga. La revisión, dirigida por el abogado de derechos humanos John Scott QC, recomendó que el Ejecutivo escocés introdujera una legislación para indultar a los mineros condenados por ciertos delitos, como la «alteración del orden público».

Al anunciar el indulto, Brown ha definifo la huelga de los mineros de 1984 como «una de las disputas industriales más amargas y divisorias que se recuerden».

Con este paso, el Gobierno de Edimburgo trata de «contribuir de alguna manera a la reconciliación» y «ayudar a curar las heridas dentro de las comunidades mineras de Escocia».

Entienden que, para ello, el indulto es la mejor herramienta a su alcance. «Un perdón colectivo devolverá la dignidad a los condenados, brindará consuelo a sus familias y, espero, cerrará el sentido de injusticia que pueden sentir los miembros de las comunidades mineras».