Iñaki  Iriondo
Cronista político

Una votación irregular permite que políticos sigan con pasarela al TVCP

La presidenta del Parlamento de Gasteiz, Bakartxo Tejeria, ordenó ayer repetir una votación en la que, sin ningún incidente en los 20 segundos de los que se disponen para pulsar el botón, los parlamentarios de PNV, PSE y PP rechazaron su propia propuesta sobre la reforma de la ley del TVCP.

La presidenta del Parlamento puso a votación las partes del dictamen acordadas por PNV, PSE y PP+Cs que habían sido enmendadas. La propia Bakartxo Tejería preguntó a su grupo el sentido del voto («Guk?»). Y se ve a la jeltzale Lexuri Arrizabalaga marcar con dos dedos la señal del «no». Y todos los partidos votaron «no». Unanimidad. PNV, PSE y PP+Cs se acababan de cargar su propia reforma del TVCP.

Fue entonces cuando los comentarios subieron de volumen, pero durante los 20 segundos que parlamentarios y parlamentarias tuvieron para apretar el botón que les habían indicado, nadie protestó.

Hay un acta de la Junta de Portavoces del 14 de febrero de 2013 en la que la propia Bakartxo Tejería asegura que si nadie se queja de un fallo en ese tiempo no repetirá votaciones por errores, aunque se podrán hacer constar en acta. En aquella ocasión, José Antonio Pastor, del PSE, mostró su acuerdo con el criterio, pero que se aplique con flexibilidad. Joseba Egibar le respondió que «en un Parlamento cada uno tiene que asumir la responsabilidad de sus fallos y no trasladarla a los demás».

Pues ayer ni Bakartxo Tejeria ni Joseba Egibar, asumieron sus propias palabras. La presidenta ordenó la repetición de la votación, sin explicar por qué y en medio de su propio desconcierto. Hubo que votar otras dos veces para que se diera el resultado deseado por la mayoría gubernamental, porque por medio hubo otro intento fallido.

Desde EH Bildu Nerea Kortajarena criticó lo que estaba ocurriendo, asegurando que eso «no tenía un pase». Apuntó que «los letrados tenían algo que decir», pero la presidenta le replicó un «pero no ha dicho nada, estamos en votación, ya está».

Y así quedó, de momento, aprobada la reforma de la ley que regula el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas, al menos hasta que se resuelvan las iniciativas abiertas en el propio Parlamento o las que puedan, en el futuro, llegar a los tribunales.

Sin incluir carencia

Haciendo un poco de historia, cabe recordar que la elección de José Luis Bilbao como miembro del Tribunal Vasco de Cuentas Públicas en junio de 2015, cuando todavía era diputado general de Bizkaia en funciones a la espera de que Unai Rementeria cogiera su relevo al frente del ente foral, no sentó bien en una buena parte de la opinión pública. Los grupos de la oposición registraron entonces proposiciones de ley para impedir casos similares, pero decayeron con el adelanto electoral

Al inicio de esta legislatura, EH Bildu y PP+Cs retomaron sus intentos de reforma. La formación independentista recogía que «no podrán ser designados miembros del Tribunal Vasco de Cuentas Públicas quienes en los dos años inmediatamente anteriores hayan tenido a su cargo la gestión, inspección o intervención de los ingresos y gastos del Sector Público Vasco». Por su parte, el PP+Cs ampliaba este plazo a los seis años y lo extendía a todo tipo de cargos parlamentarios. En sus enmiendas, Elkarrekin Podemos-IU fijaba esa carencia en tres años.

Pero los partidos del Gobierno, PNV y PSE dejaron clara su oposición a que se establezca cualquier tiempo de paréntesis entre dejar un cargo y formar parte del TVCP.

La ley ha estado debatiéndose durante un año en el Parlamento y finalmente el PP ha dado su brazo a torcer y se ha aprobado una ley que seguirá permitiendo más casos como el de José Luis Bilbao. La explicación oficial del PNV es que no debe instalarse el principio de sospecha, sino el de inocencia y que ya hay instrumentos para evitar o corregir si se da algún tipo de actuación irregular.

Por contra, David Soto, de Elkarrekin Podemos-IU, recordó que el principio de carencia está recogido en las leyes de regulación de numerosos tribunales y órganos similares de otras comunidades y estados europeos. En su opinión, el PNV lo hubiera admitido si no existiera el precedente del ex diputado general de Bizkaia. Lo que los jeltzales no quieren es «asumir que lo que se hizo con José Luis Bilbao no debería de haber sucedido», indicó.

Mayoría de tres quintos

Hasta ahora la elección de los miembros del TVCP exigía el apoyo de la mayoría absoluta de la Cámara. A partir de la aprobación (o no) de esta ley, esa mayoría habrá de ser de tres quintos, es decir 45 de los 75 escaños. Esto ha sido recibido como una mejora por todos los grupos, aunque hay algunas reticencias sobre la proporción elegida.

El parlamentario de EH Bildu Josu Estarrona recordó que hay otros organismos, como el consejo de EiTB o el Consejo Social de la UPV, para los que se requieren dos tercios del Parlamento, lo que son 50 escaños. Propuso hacer cuentas y ver cuánto suman PNV, PSE y PP. Son 47 representantes, lo que supera los tres quintos pero no llega a los dos tercios. Estos partidos tendrán la llave para la elección de los siete miembros.

Según se ha publicado en varios medios, el acuerdo entre PNV, PSE y PP+Cs conllevará que los tres grupos se repartirán entre ellos 6 de los 7 miembros del TVCP. De ellos, 3 serían para los jeltzales (31 escaños), 2 para el PSE (10 escaños) y 1 para la coalición derechista (6 escaños). Esto puede llevar a entender por qué el PP ha buscado el acuerdo con los grupos del Gobierno dejando de lado la reivindicación de la carencia en la que basó su proposición de ley.