El lehendakari de la CAV, Iñigo Urkullu, ha mostrado este viernes su «preocupación» por la estrategia de «dumping fiscal» que plantea la Comunidad de Madrid al bajar los impuestos que gestiona.
El Gobierno que preside Isabel Díaz Ayuso aprobó el miércoles la rebaja de 0,5 puntos del IRPF en todos los tramos autonómicos, así como la supresión de todos los tributos propios, que son estos tres: el impuesto sobre la instalación de máquinas recreativas, el de depósito de residuos y el aplicado sobre actividades económicas.
En un coloquio de Nueva Economía Fórum, en Bilbo, Urkullu ha dicho que no quiere entrar «en ninguna guerra que no me corresponde», ya que la CAV tiene su régimen fiscal propio de «riesgo unilateral» por el que, si baja la recaudación, caen sus recursos propios pero tiene que mantener la misma aportación al Estado.
Al hilo de ello, ha cuestionado si una comunidad puede tener una política fiscal determinada como la de Madrid «y luego exigir al Gobierno de España una compensación por un menor ingreso por recaudación».
Además, se ha preguntado si esta rebaja fiscal no tendrá que ver con el debate sobre el cambio del modelo de financiación autonómica en el Estado español.
En su opinión, la política fiscal de Ayuso obedece a un «modelo social e ideológico», porque «a menos impuestos, menor recaudación y, por tanto, menos capacidad de gasto en políticas sociales».
Los dos proyectos de ley anunciados el miércoles por Ayuso en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno pasarán a la Asamblea de Madrid para su aprobación definitiva y su entrada en vigor el 1 de enero de 2022. En el caso del IRPF, será aplicable en la declaración de la renta de 2023.
Para poder aprobar esta rebaja de impuestos y la supresión de tributos propios, el PP necesita el apoyo de Vox en la Cámara madrileña, por lo que están desarrollando una negociación «en paralelo» junto a la de los presupuestos autonómicos de 2022.
Respuesta de Ayuso
Díaz Ayuso no ha tardado en responder a Urkullu, afirmando que la CAV tiene «un régimen fiscal a la carta» y, cuando le empiezan a ir «peor» las cosas, miran a Madrid con «envidia» y la critican «con agravio».
Ayuso ha hecho estas declaraciones tras un acto con alcaldes y portavoces del PP de los municipios de la Zona 10 de la Comunidad de Madrid, donde ha advertido al lehendakari que «con políticas autoritarias no se crece».
«Eso ya está inventado, se llama nacionalismo y allá donde se aplica empobrece a la gente», ha señalado la jefa del Ejecutivo madrileño, que gobierna gracias al apoyo de la extrema derecha.