Hernani e Injerto tendrán que esperar a mejor ocasión. Se jugaban la posibilidad histórica de disputar una ronda copera frente a un Primera, pero sus respectivas derrotas en tierras gallegas y aragonesas les han dejado sin el goloso premio.

Han sido, en todo caso, los guipuzcoanos los que más cerca han estado de, al menos, pelear por la clasificación. Han dispuesto de un penalti para igualar la contienda a falta de seis minutos para la conclusión, pero el guardameta local Jano le ha adivinado el lanzamiento al ariete Berezi que, a buen seguro, se acordará de este lance para toda su vida.

El duelo entre Victoria y Hernani ha resultado bastante equilibrado, con nervios e imprecisiones, mucho centrocampismo y control, además de escasos acercamientos para ambos bloques, al menos en lo que a la primera parte se refiere.

La clave de la eliminatoria ha estado en el inicio de la segunda mitad, momento en el que una jugada individual de Raña, el más activo en ataque por parte de los anfitriones, ha acabado con el pase de la muerte a Iago Pérez, quien no ha perdonado, empujando el esférico a las mallas.

A partir de ahí, el equipo guipuzcoano ha intentado igualar la balanza adelantando líneas, lo que le ha costado más de un susto, pero aún así ha logrado generar la ocasión de la pena máxima malograda, posterior a un remate de cabeza que no ha encontrado portería.

Sin puntería

El Injerto tampoco ha podido superar a un Utrillas que ha encontrado en Adrián a su mejor baluarte ofensivo. Tras un comienzo igualado, con varios lances que han podido acabar en gol para uno u otro lado, han sido los anfitriones quienes se han adelantado en el marcador al cuarto de hora de encuentro.

Un mal despeje de la zaga navarra lo ha aprovechado Adrián para golpear con mucha precisión, pegando en el poste e introduciéndose en las redes. El Injerto solo ha reaccionado al final de ese periodo, pero ha vuelto a encajar en el 58 con una preciosa chilena del atacante local, que también ha tocado primero el palo.

Su festejo con el público le ha costado la segunda amarilla a Adrián, pero los de Kike Jurio, sin puntería de cara al marco contrario, no han sabido transformar su superioridad númerica durante la última media hora en remontada.