Entre los brotes en algunos equipos y las restricciones puestas por el Estado francés a los viajes a o desde Gran Bretaña, la segunda jornada de las competiciones europeas de rugby quedó totalmente descafeinada.

En Champions se jugaron solo cinco de los doce partidos previstos. De los siete restantes, dos de ellos, Montpellier-Leinster y Racing-Ospreys, terminaron 28-0 por «incomparecencia» de los equipos visitantes debido a los numerosos contagios detectados en sus respectivas plantillas.

Los otros cinco (Bath-La Rochelle, Sale Sharks-Clermont, Scarlets-Bordeaux, Toulouse-Wasps y Stade Français-Bristol) fueron aplazados y por ahora su futuro es una incógnita. «¿Tiene sentido aún esta Copa de Europa?», se preguntaba la página especializada rugbyrama.fr.

Doctores tiene la madre iglesia, pero mientras responden a la cuestión Leicester Tigers sigue a lo suyo, contando por victorias sus partidos esta temporada tras doblegar 29-23 a los irlandeses de Connacht, que pese a la derrota dejaron muy buen sabor de boca.

También llevan dos triunfos los londinenses de Harlequins –ganaron 43-17 a Cardiff– y los irlandeses de Ulster y Munster, que se impusieron respectivamente a Northampton (27-22) y Castres (19-13).

Challenge Cup

El mismo problema que en la Champions se vivió en la Challenge Cup, con la mitad de la jornada sin disputar. Entre los viajes suspendidos estuvo el que Biarritz iba a realizar a Worcester.

Lyon es el único equipo con dos victorias, mientras que Saracens, que a priori partía con el cartel de favorito, sucumbió a la ola de covid, perdió 28-0 en los despachos frente a Pau y se complica muy mucho su continuidad en el torneo.

ProD2

No hubo jornada del Top 14, pero sí de la ProD2, donde Aviron Bayonnais conquistó en Rouen una victoria con más apuros de los esperados, frente a un rival de la parte baja de la tabla (27-28). Tampoco fallaron Mont de Marsan y Oyonnax, que apalizó 70-0 al colista Narbonne, por lo que el año se cierra este trío en cabeza: 57 puntos Stade Montois, 55 Oyonnax y 52 los labortanos, que tienen un colchón de once sobre Nevers.

División de Honor masculina

Al sur del Bidasoa, por fin se estrenó el Gernika. Primera victoria de los basurdes en su regreso a División de Honor, 31-35 en la cancha de Complutense Cisneros.

Parecía que el triunfo se escapaba, tras encajar un ensayo y quedarse con uno menos en el minuto 72 por la amarilla a Adrian Hall (31-29). Pero los verdinegros tuvieron las fuerzas suficientes para forzar dos golpes de castigo, canjearlos por seis puntos y conseguir un poco de oxígeno. Siguen siendo el farolillo rojo, tres puntos por detrás de La Vila, pero ya se conseguido el primer objetivo.

El otro representante vasco, Ordizia, no jugó. Su partido en Alcobendas fue aplazado, debido a los numerosos positivos en el equipo madrileño. Los del Goierri además han recibido este fin de semana la desgraciada noticia del grave accidente de Kawa Leauma cuando se encontraba en Países Bajos con la selección española.

División de Honor femenina

En categoría femenina el Eibar encajó una abultada derrota en su visita a Majadahonda (49-21). Al descanso se llegó con 20-14, pero en la segunda mitad las madrileñas pasaron por encima de las armeras.

En la tabla, las de Cristina Guntín siguen terceras con 26 puntos, por detrás de Majadahonda (32) y Cocos Sevilla (30). La cuarta plaza es para Pozuelo (24), pero ha jugado un partido menos.