Satse, ELA, LAB, CCOO y UGT han anunciado que no van a acudir a las reuniones bilaterales propuestas por la Dirección de Osakidetza, que ven «vacías de contenido», y han convocado a una reunión el próximo miércoles en la sede del Consejo de Relaciones Laborales (CRL) «ante la gravedad de la situación y la necesidad urgente de soluciones». Los sindicatos ha exigido «una negociación real y con contenidos que fructifique en mejoras concretas» y han advertido de que, en caso contrario, continuarán las movilizaciones.

«Tras las huelgas convocadas los días 25 y 28 de febrero consideramos imprescindible una negociación real, con contenidos y que aborde los problemas estructurales de Osakidetza, circunstancias que no se han dado hasta ahora en la Mesa Sectorial de Sanidad», han denunciado las centrales.

En un comunicado, los sindicatos han defendido que «el masivo seguimiento de las movilizaciones convocadas en las últimas semanas es, sin lugar a dudas, el reflejo del hartazgo tanto de la plantilla, como de la propia ciudadanía, y da buena cuenta de la gravedad de la situación que se vive en los centros de trabajo de Osakidetza y de la urgencia de soluciones inmediatas y de calado».

Así, han denunciado la situación que, a su parecer, se vive en la Mesa Sectorial de Sanidad: «Un foro de carácter meramente informativo, en el que no se negocia absolutamente nada, por la actitud de Osakidetza. Son encuentros vacíos de contenido y con un claro tinte propagandístico. La situación ha llegado a tal punto que Osakidetza incluso incumple, de manera unilateral, los acuerdos alcanzados y la información se traslada previamente a los medios de comunicación».

Por estos motivos, las centrales decidieron no acudir a la reunión celebrada el pasado día 24 de febrero, ya que la convocatoria, dicen, no iba acompañada de manera previa de «la oportuna documentación», y además, «no incorporaba en el orden del día los puntos solicitados por la parte sindical que, días antes, envió una comunicación a la Dirección de Recursos Humanos con los puntos que queríamos tratar, cuestiones todas ellas encaminadas a solucionar los graves problemas estructurales de Osakidetza».

A la vista de todo ello, reiteran que no acudirán a las reuniones bilaterales a las que han sido convocados porque «estamos ante reuniones vacías de contenido que, a la vista está, no dan ningún paso en la negociación de medidas que aborden la grave situación que soporta la plantilla».

En este contexto, invitan a Osakidetza a una reunión entre la Dirección y los sindicatos convocantes de la huelga para el próximo miércoles día 9, a las 11.00, con el objetivo de negociar reivindicaciones como el aumento del presupuesto de Osakidetza para el ejercicio 2023, hasta llegar a la media de la UE (7% del PIB); el adecuado dimensionamiento de las plantillas con la creación de miles de puestos de trabajo, que permitan racionalizar las cargas de trabajo y dar una atención de calidad a la ciudadanía; acabar con la temporalidad; recuperación del poder adquisitivo perdido y reversión de todos los recortes; y la reapertura y/o restauración de los horarios de atención en los PAC, entre otros puntos.

«Hacemos un llamamiento a la negociación, pero también advertimos a Osakidetza que no vamos a tolerar chantajes ni actos propagandísticos. Exigimos una negociación real y con contenidos que fructifique en soluciones y mejoras concretas. Si no se dan pasos en ese sentido, continuaremos con las movilizaciones», han advertido los sindicatos.

Urkullu: «Hay que priorizar el diálogo»

El lehendakari Iñigo Urkullu ha opinado sobre la reciente huelga que «no se entiende» que los sindicatos convocaran ese paro y abandonaran el diálogo en la Mesa Sectorial de Osakidetza.

Durante el pleno de control de la Cámara de Gasteiz el parlamentario de EH Bildu Iker Casanova ha preguntado al lehendakari sobre las dos jornadas de huelga en Osakidetza celebradas los días 25 y 28 de marzo y le ha reprochado que siempre diga que no es el momento adecuado para convocar paros.

Urkullu ha respondido que está a favor del derecho a la huelga, pero ha considerado que esa debe ser la «última respuesta» porque «siempre hay que priorizar la vía del diálogo».