Pensionistas han exigido este lunes en lugares como Iruñea, Bilbo y Gasteiz que en el incremento de la pensiones se aplique el «IPC real».
En el caso de la capital navarra, una manifestación ha recorrido el centro de la ciudad desde la plaza del Ayuntamiento hasta la sede del INSS, donde han denunciado «la no aplicación del IPC real a la revalorización de pensiones tanto en 2021 como en 2022».
Aseguran así que han comprobado que la revalorización «no se corresponde con el incremento del coste de la vida expresado en el IPC real» y con el que «tradicionalmente» se actualizaban las pensiones, por lo que reclaman que «se subsane el error cometido».
Esto implica, precisan, que hay que abonar un 3% para compensar la pérdida de poder adquisitivo en 2021 tras cerrar el año (de noviembre a diciembre) con una inflación del 5,5% y no del 2,5% como se ha aplicado, una cuantía que además exigen que se «consolide».
Y para 2022, dado que la revalorización se hace conforme al IPC medio del periodo noviembre de 2020-diciembre de 2021, piden que se aplique igualmente ese «IPC real del 5,5% y no del 2,5% aplicado o que se establezca una paga compensatoria» considerando el 2,5% abonado como «IPC previsto».
Por último, los pensionistas reivindican también que se fije en 1.080 euros al mes la pensión mínima.