Haritz Mujika ya ejerce como primer entrenador de la Sociedad Deportiva Amorebieta. A sus 40 años, el nuevo entrenador jefe del «Amore» tras la destitución de Iñigo Vélez de Mendizabal ha vivido este miércoles así la rueda de prensa de su presentación oficial como su primera sesión de entrenamiento en Basauri.
Flanqueado por el presidente del club Jon Larrea y el director deportivo Asier Goiria, Mujika ha dedicado su primera intervención en Urritxe a explicar que su idea es «hacer borrón y cuenta nueva». Todavía restan 12 partidos para acabar la temporada en Segunda División y aunque el conjunto zornotzarra se halla en puestos de descenso, a nada menos que siete puntos de la salvación, y con la perspectiva de tener que jugar ante el Eibar el próximo fin de semana, el que fuera hasta ahora segundo de abordo con Vélez de Mendizabal se ha mostrado confiado en «sacar a flote» este proyecto en los partidos que faltan.
«Nunca había estado en esta situación y es una gran responsabilidad. Pero cuando me lo plantea Asier [Goiria], le dije que, si se trataba de ayudar al equipo, yo encantado, porque estoy para eso y doy un paso adelante. Y además, es una oportunidad, porque empiezo a entrenar en una categoría que muchos no han llegado y que les gustaría porque es difícil. Espero aprovechar esta oportunidad y qué mejor manera que manteniendo al Amorebieta en Segunda», ha indicado a modo de tarjeta de presentación el nuevo técnico de los azules.
«Sobre todo es que los jugadores hagan borrón y cuenta nueva en su cabeza. Que lo que hemos hecho hasta ahora no nos ha valido y hay que mejorar. Tenemos que tomar una mentalidad positiva, de trabajo y apoyo entre nosotros porque es lo que nos va a llevar a estar en Segunda el próximo año», ha afirmado el preparador de Pasaia.
Mujika ha subrayado ante todo que no habrá ninguna «revolución» en su estreno al frente del banquillo el próximo domingo en Eibar. «Este equipo está hecho para jugar de una manera y para este sistema de juego. Se pueden modificar cosas pero os digo que no habrá una revolución contra el Eibar. Lo más importante está en meterles a los jugadores un plus en su mentalidad», ha indicado el técnico guipuzcoano.
En todo caso, el nuevo técnico ya ha mostrado un punto de mejora a tratar de forma inmediata. «Se trata de recuperar lo que hemos ido perdiendo con el paso de las jornadas y de los resultados. Tenemos que volver a ser el equipo intenso de principio de temporada, recuperar la agresividad defensiva, incidir en la presión alta. Eso es lo que nos puede dar resultados. Les he dicho que tenemos que ir a por los 36 puntos que restan por disputar», ha remachado Mujika.
«Decisión difícil»
El propio nuevo entrenador ha confirmado que, aunque la noticia del relevo en el banquillo no saltara hasta casi última hora del martes, el club, por medio de su director deportivo, se puso en contacto con él ya por la mañana. En este sentido, el presidente Jon Larrea no ha dudado en asumir lo «difícil» de la decisión.
«A los primeros a quienes les ha costado tomar esta decisión es a nosotros, pero la situación deportiva es la que es. Analizada por la dirección deportiva, se nos traslada a la Junta Directiva y a mí la posibilidad de darle un giro de 180 grados y una vez planteada la propuesta, la hacemos nuestra y tomamos una decisión en conjunto», ha resumido el presidente de la entidad vizcaina.
Asier Goiria, por su parte, ha destacado que Haritz Mujika tiene el perfil idóneo para ejercer de primer entrenador en sustitución a un Iñigo Vélez de Mendizabal que se ha pasado con el equipo azul las últimas tres temporadas y media. «Teníamos las cosas muy claras sobre el perfil que necesitábamos: alguien que conociese bien a los jugadores y que los enchufase, que les metiese positividad y ese ‘chute’ de energía que nos hace falta. En ese sentido, la apuesta ha sido clara», ha recalcado el director deportivo Asier Goiria.