Un joven palestino y un guardia de seguridad israelí han muerto en las últimas horas en dos sucesos separados ocurridos en la noche del viernes y en la pasada madrugada en la Cisjordania ocupada.

El joven Yahya Adwan, de 27 años, murió de un disparo en el corazón durante los enfrentamientos con miembros del Ejército israelí que llevaban a cabo una redada en la localidad de Azzun, ha señalado el Ministerio palestino de Salud en un breve comunicado.

El Ejército sionista ha indicado que sus fuerzas buscan a los sospechosos de la muerte de un guardia israelí, ocurrida horas antes en la colonia de Ariel, y que algunas carreteras habían sido bloqueadas. «Actividades antiterroristas» llaman los israelíes a sus incursiones y redadas que habitualmente se saldan con algún palestino fallecido y numerosos heridos.

Según su versión, durante la operación, «varios sospechosos arrojaron cócteles molotov a los soldados, poniendo en peligro su seguridad», ante lo que estos «respondieron disparando munición real».

Un guardia israelí fallecido

En ese ataque, ocurrido ayer por la noche, un guardia de seguridad de unos 20 años instalado la entrada de la colonia judía de Ariel cayó abatido por los disparos que realizaron dos personas que se dieron a la fuga en auto, según fuentes israelíes.

«Los terroristas se acercaron a la entrada de la ciudad de Ariel, en el norte de Cisjordania, y dispararon al guardia», ha precisado el Ejército.

El ataque ha sido reivindicado por la Brigada de los Mártires de Al Aqsa, una milicia palestina vinculada a Al Fatah, el partido del presidente de la Autoridad Palestina (ANP), Mahmud Abbas.

Este grupo armado ha difundido un comunicado por vídeo en el cual asume la responsabilidad de «la heroica operación», que aseguró que era «una respuesta a la agresión israelí en Jerusalén», informó el diario local "Haaretz".

El movimiento islamista Hamas, que gobierna la Franja de Gaza, ha exaltado el ataque al guardia israelí como «una operación heroica para concluir el mes sagrado del Ramadán».

«Esta es parte de la respuesta de nuestro pueblo a los ataques contra Al Aqsa», ha dicho en un comunicado su portavoz, Hazem Qassem, en referencia a la violencia en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén Este, donde decenas de personas resultaron heridas de nuevo ayer.

La Media Luna Roja palestina cifró en 42 las personas heridas en el lugar, venerado por musulmanes y judíos.

La fuerzas de seguridad israelíes irrumpieron en el lugar de madrugada. Según su versión, con el objetivo de contener a «alborotadores e infractores de la ley», algunos de los cuales intentaron lanzar piedras al Muro de las Lamentaciones, el sitio sagrado judío abajo de la Explanada.

La Policía israelí disparó balas cubiertas de goma y emplearon gases lacrimógenos, informó AFP.

Tensiones

En las últimas dos semanas, cerca de 300 palestinos han sido heridos en enfrentamientos en la Explanada de las Mezquitas, tercer lugar más sagrado del islam y el más sagrado para los judíos, que lo conocen como el Monte del Templo.

La Explanada de las Mezquitas se encuentra en Jerusalén Este, ocupada por Israel en la Guerra de los Seis Días de 1967 y posteriormente anexionada.

Las incursiones israelíes al lugar durante el Ramadán han generado condenas internacionales y han despertado temor por la escalada de tensión que  provocaría en toda Jerusalén.

Los judíos pueden visitar el Monte del Templo pero no pueden orar allí.