Laboral Kutxa ha revisado a la baja sus previsiones económicas y prevé que la CAV crezca en 2022 un 3,6% y un 2,7% en 2023, según las estimaciones del último Informe sobre la economía presentado este jueves. En cuanto a Nafarroa, el crecimiento estimado en 2022 es del 3,5%, mientras que en 2022 será del 2,6%.

La entidad ha ofrecido sendas comparecencias en Bilbo e Iruñea. En la capital vizcaina, el director del Departamento de Estudios de Laboral Kutxa, Joseba Madariaga, ha apuntado que es «difícil» que Araba, Bizkaia y Gipuzkoa entren en recesión salvo que se materialice «un escenario de estrés» que en este momento no prevé.

No obstante, ha aseverado que una posible interrupción del suministro de gas por parte de Rusia sería un «gran golpe para la economía europea», que podría «llevar a una recesión».

En cuanto a la inflación, Madariaga han manifestado que los precios seguirán creciendo este año aunque a finales del ejercicio podría «empezar a ceder la tasa». En lo que se refiere al empleo, se prevé un crecimiento del 1% este año y del 0,7% el próximo.

«Incertidumbre muy elevada»

El autor del estudio ha asegurado que «la incertidumbre es muy elevada». Ha destacado que ahora mismo se está en crecimiento aunque «se ha desacelerado».

Pese a un entorno «tan poco ilusionante», ha puesto en valor «el impulso transformador» que los Fondos Next Generation «deben suponer para la economía», ya que «brindan una excelente oportunidad de cara a generar tejido productivo que permita modernizar la estructura económica del país».

Bajada de 2,7 puntos

En Nafarroa,hace seis meses Laboral Kutxa predijo un aumento del PIB del 6,2%, por lo que lo ha reducido sus estimaciones en 2,7 puntos. El director de Desarrollo de Negocio, Ibon Urgoiti, ha reconocido que los cálculos están sujetos a una gran variabilidad. Por ejemplo, a principios de año la pandemia estaba en retroceso y aún no había comenzado la guerra en Ucrania.

«En este momento estamos en crecimiento. No con el mismo dinamismo de hace seis meses, pero en crecimiento. Si miramos la historia, para que se produzca un recesión tienen que darse varios factores, deberían actuar más factores como el corte de gas ruso o que el Banco Central realizara movimientos abruptos con los tipos de interés», ha señalado Urgoiti.