Txente Rekondo
Biarritz
Interview
Isladis Rodríguez
Segunda Secretaria Central de Trabajadores de Cuba (CTC Nacional)

«La solidaridad es clave en nuestro quehacer diario»

Isladis Rodríguez, segunda secretaria de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC Nacional) y una de las invitadas al reciente congreso de LAB, analiza en entrevista a NAIZ los últimos acontecimientos en la isla y el camino que sigue la Revolución a día de hoy.

Isladis Rodríguez, Segunda Secretaria Central de Trabajadores de Cuba (CTC Nacional), durante el congreso que LAB celebró en Biarritz.
Isladis Rodríguez, Segunda Secretaria Central de Trabajadores de Cuba (CTC Nacional), durante el congreso que LAB celebró en Biarritz. (T. Rekondo)

Se cumplen más de 60 años del embargo y las sanciones de Estados Unidos a Cuba, y sin embargo, la isla avanza.

Lo más importante es la resistencia del pueblo cubano, una resistencia creativa. Durante estas décadas nos asfixian económicamente, a esto se le añade los dos últimos años de covid. El bloqueo tiene efectos muy duros en el ámbito de la salud. No nos permite realizar compras e inversiones para desarrollar el sistema sanitario de nuestro país. Y a pesar de todo en nuestro país seguimos garantizando la educación y la salud universal. El embargo es una cruda realidad diaria, desde Estados Unidos se han implementado más de doscientas nuevas medidas contra Cuba. Nuestra economía centralizada se ve afectada al no poder importar determinados recursos. Programas agroalimentarios o electroenergéticos se ven limitados por esas sanciones. Nos quieren asfixiar pero resistimos. Hay carencias y necesidades, pero en Cuba lo más importante es la persona. Supimos implementar medidas que garantizasen la actividad laboral y la asistencia sanitaria en esas difíciles condiciones.

¿Cómo está la situación tras las protestas de 2021?

Hay tranquilidad. Desde EEUU se reproducen todos los días agresiones e intentos desestabilizados hacia Cuba a través de las campañas de determinados medios de comunicación y redes sociales, impulsando fake news. Las protestas se crearon desde EEUU con grupos para desestabilizar el pueblo cubano. Salieron a la calle pequeños grupúsculos la tarde del 11 de julio, mientras buena parte del pueblo cubano descansaba en sus casas. Al cerciorarnos de ese intento desestabilizador en busca de un cambio de régimen, la gente cubana salió a la calle para frenar la violencia contrarevolucionaria, financiada y dirigida desde Estados Unidos y que buscaban una provocación violenta (ataques contra comercios, quema de vehículos oficiales). La respuesta firme y serena del pueblo cubano frenó esa misma tarde la desestabilización, permitiendo que la tranquilidad volviese a la isla.

¿Observa diferencias en las políticas de Obama, Trump o Biden hacia Cuba?

Durante el mandato de Obama hubo ciertos acercamientos de cara a lograr alguna vía de diálogo. Con Trump se revertió la política de su predecesor y aumentaron las medidas destinadas a ahogar a Cuba. Las diferentes leyes promulgadas durante ese mandato fueron en esa línea. Biden por su parte, en un principio declaró su intención de trabajar para acercar ambos países, sin embargo, luego ha hecho todo lo contrario. Ha utilizado las leyes de Trump e incluso algunas las ha desarrollado en clave negativa para Cuba. La clase política de EEUU utiliza la situación de nuestra isla en sus campañas electorales y tras éstas, todos los actores siguen la misma política hacia Cuba.

« Logramos tres vacunas y con ellas vacunamos a todo el pueblo»

¿Qué radiografía hace de la Cuba actual?

Somos conscientes de las limitaciones y carencias que existen, pero con resistencia y creatividad estamos ejerciendo nuestra democracia. Llevamos varios meses trabajando en un nuevo código de las familias. Un proceso que ha ido a consulta durante este tiempo en barrios, fábricas, sectores estudiantiles… y con las propuestas recogidas lo someteremos a referéndum popular. Los cubanos debemos decidir qué libertad queremos, tenemos voz y voto y decidiremos libremente qué tipo de sociedad queremos construir.

¿Y de la situación económica?

Estamos desarrollando diferentes normas jurídicas que den cumplimiento al modelo económico que diseñamos a través de este socialismo cubano en transición. Nos hemos abierto a nuevos actores económicos del sector privado en Cuba, pequeñas empresas se desarrollan y contribuyen con la economía cubana. Cooperativas, pymes, trabajadores por cuenta propia están colaborando para buscar salidas y sortear las dificultades. Estamos viendo cómo pueden importar esas empresas y crear bienes y servicios que a día de hoy necesitamos. Con la diversificación de la economía buscamos lograr nuevas producciones. Intensificar la producción hacia esos sectores nos facilitará una mejor economía.

La salud sigue siendo un eje prioritario de la Revolución.

La lucha contra el covid fue un ejemplo. Logramos tres vacunas y con ellas vacunamos a todo el pueblo. Ahora estamos con las dosis de refuerzo para toda la población. A pesar de las carencias, muchas de ellas fruto del bloqueo, y las restricciones seguimos avanzado, investigando y creando todos los días, dispuestos siempre a seguir adelante.

«Los cubanos decidiremos libremente qué tipo de sociedad queremos»

La solidaridad internacionalista sigue siendo un pilar de la revolución cubana…

En Cuba trabajamos todos los días por el socialismo y queremos ser un ejemplo para el mundo. La solidaridad es clave en nuestro quehacer diario. El internacionalismo es también una de nuestras mayores características. En plena pandemia, y a pesar de las dificultades, Cuba ha seguido enviando brigadas médicas a aquellos lugares del mundo que así nos lo han solicitado. Hemos seguido mandando vacunas con efectividad a otras partes del mundo y también desde otros sectores hemos puesto a disposición de algunos países nuestra ayuda solidaria e internacionalista.

¿Cómo se presenta el futuro?

Debemos seguir desarrollando y trabajando para incorporar al modelo económico medidas que permitan la sostenibilidad en el país. Fundamentalmente en sectores alimentarios, energéticos y financieros, que permitan que Cuba pueda seguir construyendo y avanzando. Seguimos teniendo confianza en Cuba y en la población.