Las txupineras han vuelto a tomar el Arenal un jueves de Aste Nagusia tres años después de la última vez que estuvieron todas juntas. El homenaje a la figura de la txupinera ha llenado el Arenal bilbaino de rojo y el cielo de humo. Hasta 21 mujeres, todas ellas con el traje oficial, han participado en el txupin conmemorativo que tiene lugar cada año el jueves de Aste Nagusia.
Llegados al ecuador de las fiestas, los cohetes han sobrevolado el cielo de Bilbo en la que ya es una cita ineludible de las fiestas: la recepción a las mujeres que han sido txupineras. Ellas han sido las encargadas de lanzar el txupin conjunto y, a su vez, acompañar a la agraciada de este año, Iratxe Palacios.
Sobre este acompañamiento, Palacios ha declarado que se ha sentido «muy arropada». «Ha sido muy bonito. Yo ya sabía que existía este jueves especial dedicado a las txupineras, pero hay que vivirlo. Todas ellas me han transmitido su calor y cariño, no me puedo quejar», ha explicado a NAIZ.
Siendo la última en entrar al grupo por su condición de txupinera de 2022, Palacios se ha mostrado dispuesta en todo momento en escuchar las experiencias de sus compañeras. Aunque parece que, por el momento, lo está haciendo «muy bien», tal y como le han transmitido. «A Itxasne y Saioa [las dos últimas txupineras] ya las conocía antes de Aste Nagusia, y a las demás las he ido conociendo a lo largo de estos días. Lo único que me han dicho es que sea yo misma, todo han sido buenas palabras», ha relatado sobre su relación con sus predecesoras.
Palacios, que forma parte de la comparsa Tintingorri, ha cumplido su quinto día como txupinera, y hasta el momento la experiencia no le está defraudando: «Están siendo unas fiestas muy intensas y emotivas. Para mí, inolvidables. Esto no lo voy a poder volver a repetir en la vida, lo voy a llevar para siempre en el corazón».
Esta misma sensación la comparte Lourdes Luque, txupinera en 2002, y que este año ha podido volver a celebrar un día que para ella es «muy especial». «Es una experiencia muy bonita porque cada txupinera somos de un padre y una madre diferentes, y aquí nos juntamos porque nos une lo mismo: el amor a las fiestas de Bilbao. Es algo que muy pocas mujeres pueden vivir, por eso une tanto», ha contado.
Una experiencia que echaban mucho de menos, como han demostrado que más de una haya derramado alguna lágrima. Porque a pesar de compartir grupos de WhatsApp, «no es lo mismo darse un achuchón aquí, en Aste Nagusia, que un abrazo virtual».
Homenaje a la ikurriña
Encabezada por la propia Iratxe Palacios, Itziar Lazkano y Marijaia, y llevada por miembros de todas las comparsas, la ikurriña ha llegado a la plaza del Arriaga en el homenaje que cada año le ofrece Bilboko Konpartsak.
Después de la actuación de un bertsolari y diversos dantzaris, Palacios ha lanzado un txupin a la vez que la ikurriña volvía a alzarse en el icónico mástil que preside la céntrica plaza bilbaina. «Ikurriña bai, espainola ez!», han gritado los asistentes al acto mientras la centenaria enseña ondeaba de nuevo sobre las txosnas.