El centro internacional de emprendimiento BAT (B Accelerator Tower) ubicado en la Torre Bizkaia en Bilbo ha sido inaugurado oficialmente este lunes. La Diputación y el Ayuntamiento de Bilbo, las dos instituciones promotoras, aspiran a que sea un núcleo de emprendimiento e innovación para incubar y acelerar nuevas empresas ("start up") tecnológicas.
El centro ha arrancado con el 80% de su espacio ocupado en sus 4.000 metros cuadrados (cuatro pisos del antiguo edificio del BBVA), a los que se sumarán en el futuro otros 4.000 m² (en otros cuatro pisos) ya que en 2023 empezarán las obras para una segunda fase.
El centro está impulsado por la Diputación foral de Bizkaia y el Ayuntamiento de Bilbo y ha costado 26,5 millones de euros a las arcas pública, 10 millones más de lo previsto tras quedar la primera licitación vacía. En 2018, el Gobierno foral llevó a cabo cambios fiscales para lograr atraer a los inversores.
Pero tanto la propiedad del edificio como la gestión del proyecto está en manos privadas. Beraunberri, el grupo inversor de José Galíndez (presidente Círculo de Empresarios Vascos), y Onchena, vehículo inversor de la familia Ybarra Careaga son los propietarios del edificio tras comprarlo por más de 165 millones de euros a los fondos de inversión Angelo Gordon y Talus Real Estate.
El proyecto BAT está operado por la consultora PwC (cuya oficina dirige el jeltzale y expresidente del Puerto de Bilbao Asier Atutxa) en alianza con Talent Garden e Impact Hub.
El centro comienza a operar con más de 40 startups de 30 corporaciones, acceso a una red de más de 100 firmas nacionales e internacionales de venture capital y private equity y más de 50 agentes de ciencia tecnología y academia.
Entre las empresas privadas que han conectado sus equipos de innovación a la torre están Iberdrola, Petronor, Elecnor, Enagas, BBVA, Santander, BBK, CaixaBank, Sabadell, Mondragón, Ibermatica, Tubacex, CAF, Viuda de Sanz, Eroski, Kaiku, Telefónica, Euskaltel...
También colaboran firmas de capital riesgo, centros tecnológicos y universidades. Todos ellos trabajan con unas cuarenta empresas incipientes instaladas en la torre, que pertenecen a tecnologías como quantum, IOT, big data, blockchain o realidad virtual.
Alabanzas institucionales al proyecto
Según han señalado en la inauguración, el objetivo de BAT es «atraer el talento a la torre y aportar sus relaciones internacionales para que los emprendedores que se instalen tengan conexión internacional con otros polos tecnológicos». Ya está conectado con 140 proyectos similares de aceleración de empresas repartidos por todo el mundo, desde Shanghai a Singapur, pasando por Boston o Sao Paulo.
En el acto de inauguración, el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha asegurado que el proyecto BAT «refleja la vocación de la CAV como territorio del emprendimiento» y tiene el desafío de «posicionar Euskadi como polo de referencia internacional en emprendimiento tecnológico industrial».
«Se necesita una nueva generación de personas emprendedoras y empresas, pequeñas, medianas y grandes, que contribuyan al renacimiento de la economía vasca. Solo así garantizaremos el presente y el futuro de Euskadi», ha señalado.
Por su parte, el diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, ha señalado que BAT es el fruto de «un modelo de competitividad nuevo, bueno, y necesario que es sostenible, resistente y en línea con las grandes transformaciones globales». «Tenemos que saber aprovechar las oportunidades para seguir siendo un referente industrial, con una industria de vanguardia, de alto valor añadido y con un componente tecnológico importante y con personas capacitadas», ha añadido.
También ha mostrado su satisfacción por la puesta en marcha de este proyecto el alcalde de Bilbo Juan Mari Aburto, quien ha destacado que Bilbo es «la ciudad de las grandes oportunidades». Ha subrayado que hoy arranca BAT como «un proyecto vivo, que irá completándose en los próximos tiempos».
Críticas al proyecto
La portavoz del grupo municipal de EH Bildu, Jone Goirizelaia, ha cuestionado que la inversión realizada por el Ayuntamiento de Bilbo «vaya a revertir en beneficio de la mayoría social bilbotarra». «El modelo sobre el que se sostiene este proyecto responde a recetas del pasado y consideramos que no servirá para hacer frente a la crisis ecológica, energética, y socio económica que estamos viviendo, con un paro crónico de más de 20.000 personas en Bilbao», ha explicado.
Goirizelaia ha insistido en la «opacidad» de todo el proceso en el que se ha gestado el proyecto de la Torre Bizkaia, en el que «la transparencia y los argumentos para justificar semejante inversión de dinero público han brillado por su ausencia».
«Y todavía son solo incertidumbres las que rodean este proyecto, que denominan faro del emprendimiento, pero que, desde luego, no sabemos a quién alumbrará», ha concluido.
El juntero de Elkarrekin Podemos-IU en las Juntas Generales de Bizkaia, Israel Escalante, también se mostró muy crítico con el proyecto en ese artículo de opinión publicado en GARA: ‘Inauguración sorpresa (Torre Bizkaia)’.
La plataforma Euskal Herriak Kapitalari Planto también pidió en marzo de 2021 retirar el proyecto de la Torre Bizkaia. En este artículo se exponen algunos de sus argumentos: ‘Torre Bizkaia: un faro para el Titanic de la economía vizcaina’.