Mikel Insausti
Crítico cinematográfico

Un vampiro que no chupa sangre, que muerde culos

SHIN CHAN Y EL MISTERIO DE LA ACADEMIA TENKASU
Japón. 2021. 104’ Tít. Orig.:
‘Eiga Crayon Shin-Chan nazo meki! Hana no tenkasu gakuen’. Dtor.: Wataru Takahashi. Guion: Kimiko Ueno. Prod.: Shin-Ei Animation. Voz V.O.: Yumiko Kobayshi, Tamao Hayashi, Toshiyuki Morikawa. Can.: Macaroni Enpitsu.

Cartel original asiático con Shinnosuke uniformado
Cartel original asiático con Shinnosuke uniformado (NAIZ)

El comienzo de las emisiones televisivas de Shin Chan en Japón cumple ya treinta años, por más que el autor del manga original Yoshito Usui falleciera en el 2009. Otra tanto sucede con las versiones cinematográficas, de las que la película ‘El misterio de la Academia Tenkasu’ (2021) hace la número 29. Y sigue funcionando en taquilla como el primer día, porque este nuevo largometraje ha recaudado ya en el mercado asiático casi veinte millones de dólares. La aventura que presenta es tanto o más disparatada que las precedentes, ya que Shinnosuke Nohara hace cosas impropias de un niño de cinco años, como todos los padres del mundo ya saben de sobra a estas alturas.

El humor escatológico vuelve a ser la piedra filosofal de esta franquicia infantil, y en el caso de la Academia Tenkasu hay un vampiro que no chupa sangre, sino que va mordiendo culos, y al que Shinnosuke y su pandilla tendrán que investigar con la ayuda de una antigua alumna y presidenta del consejo escolar.

También llama la atención que la escuela del título sea en realidad una academia de policía, por aquello de que el precoz antihéroe nipón se convierta en investigador, junto con el resto de sus coleguitas, todos vestidos de uniforme.