Rishi Sunak ha asumido este martes a mediodía el cargo de primer ministro británico tras la visita protocolaria al rey Carlos III, y posteriormente ha dado algunas pistas de cuál será su política en su primer discurso en el cargo. Ha dicho que se pondrá manos a la obra para «reparar inmediatamente» los «errores» de Liz Truss, que hace menos de dos meses le ganó las primarias del Partido Conservador y se alzó a un cargo que ha mantenido solo 44 días.
El nuevo primer ministro es el más joven en 200 años y tiene una enorme fortuna personal junto a su mujer, la heredera india Akshata Murty, estimada en 730 millones de libras (841 millones de euros). Desde esa posición de partida, tendrá el reto de conectar con la ciudadanía en una fase económica especialmente delicada, con la inflación por encima del 10%. Ha asumido en su discurso que tendrá que tomar «decisiones difíciles. Priorizaré la estabilidad y la confianza económicas en el programa de gobierno».
Sunak ha citado su propia experiencia como ministro de Finanzas en plena pandemia para reivindicar su currículum, al tiempo que ha defendido su legitimidad. En este sentido, ha señalado que la amplia mayoría obtenida en las elecciones de 2019 no era una «propiedad individual», asociada a Boris Johnson, sino que supuso el refrendo de un programa.
El nuevo líder se ha comprometido a seguir este programa, para por ejemplo aprovechar las «oportunidades» que dejó la salida de Reino Unido de la UE y «equilibrar» la economía, pero al mismo tiempo ha asumido que lo hace en un momento de crisis «profunda», en que el país no se ha recuperado aún de los efectos de la pandemia de covid-19 y ahora hace frente a las derivadas de la «guerra de Putin» en Ucrania.
«Unir el país»
«Si he sido elegido líder del partido y primer ministro es para resolverlo y el trabajo comienza inmediatamente», ha subrayado Sunak, que aspira a «unir» al país y a ganarse la confianza de los ciudadanos, que técnicamente no le han votado como primer ministro y se inclinan ahora, según los sondeos, por conceder una nueva mayoría al Partido Laborista.
«Juntos podemos lograr cosas increíbles. Crearemos un futuro que merezca los sacrificios que hemos hecho», ha aseverado.
«Unidad» fue también su demanda básica en la primera intervención la víspera, ante cargos del Partido Conservador.
Hunt sigue en Economía
Por otro lado, también se ha confirmado que el ministro de Economía que entró en el Gobierno hace apenas dos semanas para dar marcha atrás a los planes fiscales de Liz Truss, mantendrá el cargo en el Ejecutivo de Sunak.
Hunt se ha reunido brevemente con el jefe de Gobierno en el número 10 de Dowing Street, su residencia oficial, antes de que se hiciera público el anuncio de su continuidad en el número 11 de la misma calle, donde se ubica el despacho del ministro de Economía.
Se espera que el político conservador mantenga sus planes de comparecer el próximo lunes en la Cámara de los Comunes para desgranar su hoja de ruta financiera a medio plazo.
Tras la tormenta que provocó el recorte fiscal de Truss, los mercados esperan que el Ejecutivo británico detalle sus planes para impulsar el crecimiento y reducir el peso de la deuda pública en relación con el PIB.
El presupuesto de Hunt se publicará la misma semana en la que el comité de política monetaria del Banco de Inglaterra se reunirá para evaluar una previsible nueva subida de los tipos de interés.
Tras la toma de posesión de Sunak, la libra esterlina se revalorizaba hoy un 1,41% respecto al dólar estadounidense y un 0,68% frente al euro, mientras que los intereses del bono soberano a 30 años del Reino Unido se mantenían casi sin variación, con un retroceso del 0,06%.
Sunak, que personalmente es de la facción proBrexit, ha designado como viceprimer ministro y titular de Justicia a Dominic Raab, que fue su aliado durante las elecciones primarias en el partido gobernante, primero para suceder a Boris Johnson, que dimitió el 7 de julio, y luego a Truss, que anunció su renuncia el pasado jueves.
El políticamente complicado ministerio del Interior lo ocupará Suella Braverman, del ala más derechista de los tories, eurófoba y antiinmigración, quien dimitió hace una semana de ese mismo cargo tras reconocer haber violado el código de conducta ministerial.
Durante el congreso anual del Partido Conservador a principios de octubre, Braverman dijo que era su «sueño» y «obsesión» llegar a ver un día un avión lleno de solicitantes de asilo despegar hacia Ruanda, donde las autoridades británicas aspiran a trasladar el procesamiento de solicitudes.
Sunak mantiene a James Cleverly, nombrado por su predecesora, al frente del Ministerio de Exteriores y a Ben Wallace en Defensa, en tanto que Grant Shapps ocupa el Ministerio de Empresa.
Nadhim Zahawi, que tuvo cargos en los gobiernos de Johnson y Truss, se convierte en presidente del Partido Conservador y ministro sin cartera.