El plural del título quiere inicidir en que se siguen practicando exorcismos, y que todavía El Vaticano mantiene en activo una nómina de sacerdotes que ejercen como exorcistas. Es de suponer que para evitar problemas legales el nutrido equipo de guionistas de la película afirma que se ha basado en distintos casos reales testimoniados de este tipo de prácticas, y no en uno solo. Sin embargo, el personaje del cura exorcista está claramente inspirado en el padre Jesús Hernández Sahagún, implicado en el caso fechado en el año 2014 de una adolescente burgalesa, y que acabó en los juzgados. Para evitar posibles paralelismos en la ficción la acción se ha trasladado a Ourense.
El equipo de producción es el mismo que estaba detrás de la películas de terror de Albert Pintó ‘Malasaña 32’ (2020), por lo que se procura dota de un aire realista a la ambientación. La protagónica Laura Villegas, interpretada por María Romanillos, recuerda a la de ‘Camino’ (2008), ya que con en la obra de Fesser está sometida a una madre fanática religiosa.
El caso de posesión en su vertiente social es visto como una serie de rituales abusivos contra una adolescente de provincias, cuyo único pecado es participar en una serie de esperitismo con amigos en la noche de Halloween, como referencia obligada para la fecha de estreno.