El expresidente de la Real Sociedad Iñaki Badiola ha negado este martes cualquier vinculación con las cuentas de Twitter desde las que se dirigieron presuntas injurias y calumnias contra distintos políticos, jueces, periodistas y medios de comunicación guipuzcoanos.
«No he creado ni publicado información» en esas cuentas, ha dicho: «Son hechos ajenos a mi persona y ahí se acaba mi declaración». Solo ha respondido a las preguntas de su abogado.
Badiola ha hecho esta afirmación durante la primera sesión del juicio que se sigue en su contra en el Juzgado de lo Penal número 3 de Donostia, en el que se enfrenta a una petición de 66 años de cárcel por parte de la Fiscalía de Gipuzkoa.
Entre las personas presuntamente injuriadas por Badiola se encuentran el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y el diputado del PSOE en el Congreso y exalcalde de Donostia, Odón Elorza.
La relación de presuntos agraviados la completan varios magistrados guipuzcoanos, una letrada de la administración de Justicia, tres responsables de la Hacienda foral de Gipuzkoa, un notario, un medio de comunicación y varios periodistas.
En concreto, el escrito de acusación provisional del Ministerio Público atribuye a Badiola quince delitos de calumnias hechas con publicidad, otros quince delitos de injurias graves, y quince más contra la integridad moral, así como dos delitos de descubrimiento y revelación de secretos con difusión de imagen.
El juicio, que está previsto que se prolongue hasta el jueves, con posibilidad de que se habilite el viernes en caso de que no dé tiempo a finalizarlo, no se ha visto afectado por la huelga indefinida a la que está llamado el colectivo de letrados de la administración de justicia que arranca este martes.
Iñaki Badiola se convirtió en presidente de la Real como candidato único en 2008, con un discurso presuntamente regeracionista de un club que estaba inmerso en la crisis deportiva y económica que sucedió al descenso a Segunda en 2007.
Durante su mandato, el club entró en Ley Concursal y las cosas no mejoraron. Terminó siendo sustituido por Jokin Aperribay, tras lo que la Real Sociedad logró enderezar el rumbo tanto en lo futbolístico como en sus cuentas.
Jueces entre los testigos; el miércoles, Olano
Durante la primera jornada de la vista han testificado la primera jueza que instruyó el «caso Cabezudo», Ana Isabel Pérez Asenjo, y la presidenta de la Sección Segunda de la Audiencia de Gipuzkoa, Yolanda Domeño, dos magistradas que en algún momento tuvieron que resolver distintos asuntos relacionados de alguna manera con el procedimiento concursal en el que estuvo inmersa la Real Sociedad mientras estuvo en Segunda División.
Durante su declaración, Domeño ha recordado cómo ella fue vinculada en estos tuits con una supuesta trama de corrupción judicial en Gipuzkoa, al tiempo que se le acusaba de ser la «jefa de la manada de pederastas de la provincia», unas imputaciones «brutales, implacables y demoledoras» que ha dicho que le crearon una «angustia y un desasosiego impresionantes».
«Viví un calvario durante meses» en los que estaba pendiente de «ver qué basura se iba a publicar al día siguiente», ha detallado la magistrada, quien ha lamentado también los ataques vertidos contra su esposo fallecido años atrás y que «no podía defenderse».
Ha precisado que su compañera, la magistrada Victoria Cinto, también fallecida, atravesó una coyuntura similar a la de ella y que esta le confesó que la situación «no le estaba haciendo ningún bien» para la grave enfermedad que ya padecía en aquel momento. En la sesión de hoy se ha reproducido la declaración que hizo Cinto en la fase de instrucción.
«En 40 años de ejercicio, jamás he sido objeto de un ataque tan despiadado», ha resumido la magistrada.
Por su parte, la también magistrada Ana Isabel Pérez Asenjo ha comentado que en los tuits publicados contra ella fue acusada de «corrupta» y de «la peor imputación que se puede hacer a un magistrado» que es la de «estar prevaricando».
No obstante, ha recordado que también se le achacó «encubrir la pederastia» en un tuit que fue el que más le «molestó» porque después fue utilizado por una tercera persona para hacer un video «viral» que fue visto por más de un millón de personas, en alusión a Marío Díez, el abogado de algunas de las víctimas de Kote Cabezudo.
En esta misma sesión, también ha testificado una letrada de la administración de justicia, esposa de un periodista, que fue acusada desde las citadas cuentas de Twitter de realizar «filtraciones» a su marido, informador de un medio de comunicación con el que ha sugerido que el acusado mantenía desavenencias.
Finalmente, ha comparecido un empresario y notario donostiarra que fue involucrado en un tuit con el caso Cabezudo, a raíz del cual sus socios empresariales le exigieron su dimisión, en una maniobra que él ha atribuido a un intento de colocar en su holding empresarial a un despacho de abogados afín a Badiola.
Está previsto que el juicio se reanude el miércoles con la declaración del diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y varios responsables de la Hacienda foral de este territorio en la que se dirimió parte del proceso concursal de la Real Sociedad.