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Colectivos de Sanduzelai piden en el Parlamento apoyo al soterramiento de la rotonda

Colctivos de Sanduzelai han comparecido este miércoles en el Parlamento navarro para reclamar apoyo a la demanda vecinal de soterramiento de la rotonda que divide este barrio iruindarra en cuatro zonas de difícil comunicación. Han recordado que llevan décadas con esta reivindicación.

Manifestación celebrada en Sanduzelai para pedir el soterramiento del tráfico en la rotonda, en una imagen de archivo.
Manifestación celebrada en Sanduzelai para pedir el soterramiento del tráfico en la rotonda, en una imagen de archivo. (Iñigo URIZ/FOKU)

Diferentes colectivos vecinales del barrio iruindarra de Sanduzelai han pedido en el Parlamento navarro apoyo en su demanda de soluciones para los problemas que genera la rotonda central del barrio, «hartos» tras décadas de denunciar las molestias del tráfico pero también de la incomodidad e inseguridad para peatones del actual paso subterráneo.

Lo ha planteado en nombre de la comunidad vecinal Mikel Rodríguez, acompañado de una nutrida representación de colectivos afectados en la sesión de trabajo, en la que ha expuesto que el de Sanduzelai es un «barrio estratégico», pegado a Landaben y una de las entradas principales a Iruñea, en el que residen más de 12.000 personas, aunque hoy es una población envejecida y con un alto índice de dependencia.

Sin embargo, la rotonda que marca el eje del barrio (que soluciona el cruce de dos grandes viales en el exterior y envía a los peatones por debajo tras salvar un evidente desnivel) lo divide en cuatro sectores pero los servicios no están repartidos entre ellos, de forma que los vecinos de una de las zonas deben desplazarse continuamente a las otras para acudir a servicios sanitarios, bancarios, educativos o comerciales.

La rotonda «es como un muro de Berlín que sufrimos cada día, no solo las personas con movilidad reducida, sino cada uno de los vecinos», ya que la fuerte pendiente que deben salvar en el subterráneo peatonal se hace ya no solo con sillas de ruedas o bastones, sino con silletas de bebé, carros de la compra o pesadas bolsas en ciertos casos que hacen más penoso el tránsito.

El hielo de vez en cuando en invierno y ocasionales inundaciones por lluvia dificultan aún más el paso por los túneles, que por la noche se convierten en una zona insegura, ha dicho un Rodríguez que también ha lamentado los ruidos y molestias que genera el tráfico (calculan que unos 50.000 coches diarios) en la zona.

Con todo ello, y más aún en la tendencia actual en toda Europa a facilitar la vida de los peatones, ha considerado que son los coches los que deberían ir por una vía soterrada, algo para lo que ya pidieron un estudio con un concurso de ideas con el objetivo de que «se dé una solución final. No queremos un apaño sino una solución definitiva».

«Los parches» de Maya

Posteriormente, y tras escuchar las alusiones de Navarra Suma a que el alcalde Enrique Maya había propuesto la posibilidad de instalar ascensores públicos, el portavoz ha considerado que esto sería «un parche», dados los problemas de mantenimiento, las colas de espera que a veces se producen y su nula solución a la inseguridad ciudadana en determinadas horas.

Al respecto, ha recordado que la demanda vecinal lleva décadas en la calle, en los últimos años con manifestaciones, peticiones de reunión con partidos y representantes públicos, y ha reconocido que aunque en algunos momentos se ha llegado a estudiar, «después no se ha hecho nada, por lo que estamos hartos», ha resumido.

En el turno de los grupos, todos ellos se han mostrado de acuerdo en reconocer la existencia de un problema, pero han discrepado de las competencias del Parlamento para su solución, e incluso han deslizado los intereses electorales que pueden esconderse detrás de las buenas palabras.

Por el PSN, Jorge Aguirre ha compartido la necesidad de actuar en la zona y de «solucionar el modelo caduco de ciudad que tenemos», pero ha reconocido que el actual momento de la legislatura da poco margen a actuaciones.

En la misma línea, Pablo Azcona (Geroa Bai) ha rechazado posibles soluciones «cortoplacistas» y ha pedido una «integral», tras considerar «chocante» que habiendo habido acuerdos al respecto no se haya priorizado una actuación.

Adolfo Araiz, de EH Bildu, ha animado a los vecinos a continuar con sus reivindicaciones, pero les ha advertido de que no se crearan «falsas expectativas» y de que el asunto «fundamentalmente tiene una solución municipal», aunque podría encajar alguna aportación desde los Presupuestos Generales de Nafarroa al afectar a un eje viario.

Ainhoa Aznarez (Podemos-Ahal Dugu) también ha considerado que «con voluntad política» se puede desatascar el problema e incorporar soluciones, mientras que Marisa de Simón (I-E) ha considerado «lamentable» que se vaya a acabar la legislatura «sin que se haya movido un dedo» y que otros grupos estén «haciendo campaña electoral» ahora con el asunto.

La parlamentaria de Navarra Suma Yolanda Ibáñez se ha definido «desorientada» por el debate de este asunto municipal en el Parlamento navarro, aunque ha concedido que si tenía incidencia extramunicipal «nadie ha contemplado una partida» en los recientemente aprobados Presupuestos Generales de Nafarroa para 2023.