Los representantes de Gure Esku Josu Etxaburu y Jexux Olaziregi ha comparecido este lunes por mañana en la Comisión de Instituciones, Gobernanza Pública y Seguridad del Parlamento de Gasteiz, para invitar a los miembros de la Cámara a «ir más allá del ejercicio de las declaraciones institucionales o de partido, a trabajar en profundidad para que el derecho a decidir sea ley, a realizar propuestas, buscar resquicios, proponer diferentes alternativas y aunar esfuerzos».
Gure Esku registró esta petición el 22 de junio de 2022 cuando se entrevistó con la presidenta, Bakartxo Tejería, y dio cuenta de la presentación de 21.389 firmas de ciudadanos y ciudadanas que entienden que «necesitamos herramientas de decisión al alcance de la ciudadanía y proponemos y pedimos al Parlamento Vasco que promueva el debate sobre nuestro futuro político, garantizando la participación efectiva de la ciudadanía, y que asuma, regule y desarrolle toda la capacidad de celebrar referéndums».
Desde junio las posiciones de los grupos no han avanzado mucho. Evidentemente, Vox, PP+Cs y PSE se han mostrado en contra de cualquier reconocimiento del derecho a decidir de la ciudadanía vasca. EH Bildu y Elkarrekin Podemos-IU han mostrado su apoyo a que se retome el debate. Maddalen Iriarte ha incidido en que en la ponencia se alcanzó ya un Acuerdo de Bases por amplia mayoría e Iñigo Martinez Zatón ha recordado que llevan en su programa electoral la defensa del derecho a decidir y su apuesta por un estado confederal.
El portavoz del PNV, Jon Andoni Atutxa, por su parte, ha respondido a Gure Esku que analizarán su propuesta con «el debido detenimiento y sumo interés, como no podía ser de otra forma, y estamos dispuestos a seguir trabajando». Ese compromiso de análisis lo anunciaron los jeltzales en junio, al tiempo que apoyaban que se tramitara la comparecencia en comisión que se ha producido este lunes, «con el objeto de poder realizar la valoración política correspondiente y estudiar posibles iniciativas».
Cuatro peticiones concretas
Cuatro son las propuestas concretas que Gure Esku ha realizado: La primera, «abrir un debate, a más tardar en el curso político 2022-2023, para iniciar un proceso de decisión y determinar los pasos para decidir nuestro futuro político». La segunda, «que este debate sea transparente y abierto y que en él se escuche y se atienda la voluntad de la ciudadanía». También demanda «basar el proceso de decisión en la participación ciudadana, previendo mecanismos e instrumentos para ello, incluyendo una consulta para ratificar la voluntad de la ciudadanía vasca». Y, por último, «que el Parlamento Vasca dé cauce a estos compromisos, y se logren los acuerdos pertinentes para convertir el derecho a decidir en ley».
A su entender, «es tiempo de pasar de los dichos a los hechos, de dar un salto cualitativo y significativo en la construcción de país de cara al futuro de la sociedad vasca». Gure Esku sostiene que «este es un reto colectivo, de ciudadanía, de agentes y representantes políticos y sociales. Cada cual tiene su misión. Por eso hemos hecho un llamamiento a los y las representantes políticos del Parlamento Vasco para que asuman las responsabilidades y compromisos que les corresponden».
La respuesta de los grupos contrarios
Vox ha comenzado con tono irónico corrigiendo lo que ha dicho que «sería una errata» de Gure Esku porque en la documentación presentada habla de «cinco capitales vascas» cuando «solo son tres», puesto que «Baiona y Pamplona no son vascas». Y también ha considerado insignificante la presentación de 21.389 firmas. La portavoz ultraderechista Amaia Martínez ha vuelto luego a clásicos como que el derecho de autodeterminación solo es aplicable a colonias y que los vascos ya decidimos al apoyar la Constitución española y el Estatuto de Autonomía.
Luis Ignacio Gordillo, de PP+Cs, ha dejado claro desde el principio que rechazaban las propuestas de Gure Esku, que ha descalificado afirmando que son argumentos «falaces» que vienen desde el siglo XIX, y que si triunfaran nos retrotraerían a la Edad Media y el vasallaje. Ha criticado también que la defensa de la independencia solo se puede hacer desde argumentos emocionales y no desde la lógica.
Por el PSE ha intervenido Miren Gallastegi, que ha agradecido la presencia de los representantes de Gure Esku, a los que les ha comentado que según las encuestas la idea de la independencia no está ganando adeptos. Ha recordado que su partido nunca ha participado de las propuestas y movilizaciones de Gure Esku y se ha mostrado expectante para ver cómo reaccionaría quienes sí que han participado pero poniéndose bastante de perfil.
Y la de los partidarios
Iñigo Martínez Zatón, de Elkarrekin Podemos-IU, se ha mostrado a favor del derecho de autodeterminación, pero apuntando que ello no sería la solución a todos los problemas, puesto que hay algunos que ya se pueden abordar ahora. Ha apuntado que su grupo ha propuesto retomar los debates de la Ponencia de Autogobierno, pero que no ve voluntad política para ello, y que además llega un periodo electoral, a lo que hay que sumar que el Parlamento y el Gobierno afrontan «un embudo de leyes».
Por EH Bildu, Maddalen Iriarte, ha mostrado su apoyo a las demandas de Gure Esku y ha subrayado que 21.389 firmas recogidas además en plena pandemia obligan al Parlamento a «actuar con responsabilidad. Ha insistido en que el derecho a decidir es una reclamación mayoritaria y que no se puede dotar a la minoría de capacidad de veto, y que tampoco se puede decir que este debate «no toca». Ha abogado por sincronizar la actividad institucional con la participación ciudadanía, y ha asegurado que en Europa hay ejemplos de cómo hacerlo. Iriarte ha comprometido la disposición de su grupo a trabajar de forma activa con la propuesta de Gure Esku.
El jeltzale Jon Andoni Atutxa ha apuntado que no era el momento de entrar en un debate en profundidad sobre sobre algunas de las cosas que se habían dicho durante la comisión. Ha dejado constancia de que analizarán la propuesta de Gure Esku y ha mostrado la disposición del PNV a «seguir trabajando».
Agradecimiento a todos
El portavoz de Gure Esku Josu Etxaburu, que ha realizado todas sus intervenciones en euskara, no ha querido entrar en polémicas con los portavoces de los grupos, agradeciéndoles sus intervenciones también a aquellos que «han querido ilustrarnos». Ha subrayado que el mero hecho de que hayan asistido todos los partidos ya demuestra, en su opinión, que este es un tema importante e interesante. El PP se ha quejado de que «no sé a qué han venido» si no han puntualizado las observaciones que les han hecho.
Al margen de esto, Etxaburu ha querido dejar claro que considera que en estos diez años de existencia de Gure Esku se ha avanzado y ha añadido que seguirán trabajando tanto en la movilización ciudadana como en el intento de empoderamiento para que el derecho a decidir pueda hacerse ley.
Ha concluido que «el derecho a decidir merece un debate serio. Tendremos que vislumbrar el proceso y definir la estrategia. Tenemos que dibujar el rumbo hacia nuestra soberanía, y construir un faro colectivo para poder llegar a buen puerto. Lo agradecerá la ciudadanía y toda la sociedad. ¡Es hora de coger el timón del futuro!»