Stop Desahucios Euskadi ha reclamado a las entidades bancarias, y en particular a Kutxabank, que en 2022 «ha firmado el 60% de las hipotecas en la CAV», que flexibilicen los requisitos que se exigen para acogerse al Código de Buenas Prácticas Bancarias (CBPB), ya que este es «totalmente insuficiente para proteger a los deudores hipotecarios sin recursos».
El CBPB es un mecanismo existente en el Estado español al que acogerse en caso de no poder pagar la hipoteca, parar reestructurar la deuda a cifras más acordes con la realidad, pero exige que se cumplan determinadas condiciones sobre los ingresos de la unidad familiar –máximo 25.200 euros brutos anuales– o sobre el coste de la vivienda, máximo 300.000 euros.
Stop Desahucios remarca que los elevados precios en la CAV, sobre todo en determinados puntos, hacen que aún con ingresos por encima de la media las familias no puedan hacer frente a «subidas de cuota de entre 250 y 300 euros al mes» y «tengan que elegir entre pagar la subida especulativa del Euribor o la cesta de la compra».
«Escandalosos beneficios»
Este colectivo considera que es de «justicia social» que las entidades financieras, que obtienen «escandalosos beneficios», «flexibilicen» esas condiciones –el propio código se lo permite– para que «puedan beneficiarse muchos más clientes empobrecidos» con la subida del Euribor y de la inflación.
En su nota subraya que «el oligopolio de los grandes bancos ganó 20.850 millones en 2022, un 28% más que en 2021, mientras que Kutxabank ha ganado en el último trimestre de año pasado 300 millones», a la espera de que haga públicos los resultados de todo el ejercicio.
«Los bancos que han obtenido beneficios récord gracias a la subida del Euribor, que fueron rescatados con dinero público en la pasada crisis financiera, que pagan sueldos millonarios a sus ejecutivos que están entre los más elevados de occidente y que, por contra, están remunerando con un ridículo 0,65% los depósitos de sus clientes, deben contribuir a que ninguna familia vasca hipotecada deudora de buena fe no pueda pagar la cuota y corra el riesgo de perder su vivienda», insiste Stop Desahucios.