Mikel Insausti
Crítico cinematográfico

Rabanne en el espacio

Todo indica que Paco Rabanne ha dejado como heredero creativo al frente de su taller de costura a Julien Dossena, así que por la parte del vestuario no habría que desconfiar del anunciado remake del clásico de Roger Vadim ‘Barbarella’ (1967). Quien no las tiene todas consigo es Jane Fonda, que no cree en el proyecto de la televisiva Sydney Sweeney como productora y actriz estelar. En su momento la Fonda ya tuvo que luchar contra el productor Dino De Laurentiis, debido a que la novela gráfica de Jean-Claude Foret en la que se basó la película era concebida como un cómic erótico, mientras que la protagonista defendía una lectura feminista adelantada al actual empoderamiento de la mujer.

Rabanne diseñó para aquella moderna aventurera espacial el ya icónico traje metálico verde, mientras que del resto del vestuario se ocupó Jacques Fonteray, quien ante lo evidente del plagio no tuvo otro remedio que advertir en los títulos de crédito que se trataba de una colección inspirada en las creaciones de Rabanne, que trabajaba con papel, plástico y las citadas piezas metálicas.

El cine más avanzado le debe mucho al modisto pasaitarra, y no solo por esta odisea futurista, ya que Audrey Hepburn también lució un modelo de Rabanne en la vanguardista obra de Stanley Donen ‘Dos en la carretera’ (1967). Y llega hasta la actualidad, porque en la reciente serie ‘Emily en París’ (2020) se puede ver a Lilly Collins como embajadora de la elegancia atemporal de Rabanne.