Jefaturas de servicio del Hospital Universitario de Basurto han denunciado que el Departamento de Salud mantiene una «política perjudicial» en relación a este centro, lo que supone actuar «en contra de los intereses de los bilbainos» a los que presta servicio. No es el primer pronunciamiento público de estos responsables médicos, que ya acusaron en noviembre a Osakidetza de valerse de «falsedades» para desmontar Cirugía Cardíaca para trasladarla a Cruces.
En una carta difundida a través de las redes sociales, 35 jefaturas de servicio acusan al departamento que dirige Gotzone Sagardui de mantener «al límite» las inversiones en este hospital, «que difícilmente sirven para conservar los servicios actuales, observando pasivamente el deterioro de las instalaciones en un hospital que se acerca a los 120 años de edad».
Invitan a cualquier ciudadano a que visite otros hospitales de Osakidetza para encontrar «espacios nuevos recién reformados, amplios, bien iluminados y con escaleras mecánicas», mientras en Basurto «hallará salas de espera en sótanos sin ventilación, consultas sin ventanas o instalaciones deficientes en espacio e incluso fuera de normativa en algunos pabellones».
Alertan de que «buena parte de los servicios de Basurto han visto frenados sus planes de desarrollo y limitada su posibilidad de mantener la actividad actual llegando en algún caso a un desmantelamiento en la práctica mientras se dota de equipamientos punteros a otros hospitales de Osakidetza».
Desvelan que «prácticamente se ha desmantelado la unidad de Genética, ya no se realizan autopsias en adultos en el hospital, la bomba de circulación extracorpórea para la Cirugía Cardiaca se ha quedado obsoleta (los cirujanos cardiacos llevan varios años pidiendo su sustitución)».
Advierten de que el objetivo de ese mantenimiento y ese desarrollo «es sencillamente dar a los pacientes a nuestro cuidado la mejor atención con la mayor celeridad posible». «Dañar a los equipos de Basurto –subrayan– es dañar a los ciudadanos de Bilbao».
La política «perjudicial» en relación a Basurto la enmarcan en un contexto de «deterioro general» de la asistencia ligada a «la falta de recursos humanos a la que increíblemente no se ha dado respuesta siendo un proceso que todas las autoridades conocen desde hace muchos años». Las movilizaciones de profesionales sanitarios consideran que es reflejo del estado de la Atención Primaria, «pilar básico de la sanidad pública».
En la carta censuran la actitud del alcalde de Bilbo, Juan María Aburto, por «observar a distancia» lo que está sucediendo y que afecta a la asistencia sanitaria de los habitantes de la capital vizcaina. Afirman «sentir envidia» por «la clarísima defensa» del hospital de su ciudad por parte del regidor de Donostia, Eneko Goia.
Resolución del juzgado
Recuerdan también que en este momento están a la espera de la definitiva decisión judicial sobre el traslado del servicio de Cirugía Cardíaca al hospital de Cruces, tras la suspensión cautelar ordenada a finales del año pasado, y aseguran que estas intervenciones «se siguen realizando a diario y con los mismos excelentes resultados de siempre». Hace unas semanas, el médico adjunto del Servicio de Cardiología y miembro de la plataforma Basurto Bizirik, Javier Rekondo, avanzó que la resolución del Juzgado Contencioso-Administrativo número 1 de Gasteiz se podría producir el miércoles 19 de abril.
Sobre este servicio expresan su preocupación por la lista de espera y destacan que, pese a que han aumentado el número de operaciones, Osakidetza no abre más camas en la unidad coronaria y esta situación «resulta especialmente grave ya que Basurto parte de un número menor de camas de críticos por población que el resto de las organizaciones de Osakidetza».
La imposibilidad de incrementar la actividad, sostienen, «no es banal pues supone retrasar la espera de pacientes candidatos a Cirugía Cardiaca, nada menos».
Estos profesionales también resaltan en su carta que han pedido a la directora general de Osakidetza que les informe de sus planes sobre Basurto y no han obtenido respuesta. «Lo único que sabemos es que están diseñando un nuevo edificio de consultas. ¿Será para convertir el hospital en un gran ambulatorio?», se preguntan.