ELA y LAB han mostrado este viernes su rechazo al acuerdo que negocian UGT, CCOO y la CEOE, que recomienda subidas salariales del entorno del 4% en 2023 y del 3% tanto para 2024 como para 2025, con una cláusula de garantía salarial que se activaría en función de la evolución de la inflación y que podría implicar un alza adicional de hasta el 1%.

En un comunicado, el sindicato ELA ha advertido de que estos porcentajes «están muy por debajo de la infación, en un contexto donde las empresas están obteniendo ganancias récord». «Estas subidas no se corresponden con la realidad, y no sirven para frenar el empobrecimiento de la clase trabajadora, menos aún si tenemos en cuenta que la inflación de los últimos años no se está trasladando a los salarios actuales, una pérdida del poder adquisitivo que este pacto tampoco contempla», ha añadido.

Y ha incidido en que «este ‘pacto’ no conlleva obligación alguna, por lo que ni siquiera garantiza la aplicación de lo pactado y busca la desmovilización. En el caso de Hego Euskal Herria, ELA seguirá defendiendo una subidas salariales que impidan el empobrecimiento de los y las trabajadoras, y para ello seguirá apostando por la confrontación, porque gracias a dicho sindicalismo las subidas salariales pactadas aquí son el doble que las pactadas en el estado».

LAB, por su parte, ha destacado que el preacuerdo «no garantiza el IPC. Así pues, CEOE, CCOO y UGT dan por buena la devaluación salarial nque se está produciendo a nivel del Estado».

«De esta forma, el hordago lanzado por CCOO y UGT en el Primero de Mayo, advirtiendo de un periodo de confrontación si no se subían los salarios, se ha quedado en agua de borrajas. Sea por incapacidad, sea por falta de voluntad o por ambas, CCOO y UGT han optado nuevamente por un acuerdo de paz social con la Patronal que conlleva pérdida de poder adquisitivo para la clase trabajadora», ha apuntado.

La central ha señalado que, «por fortuna, en Euskal Herria los y las trabajadoras han optado mayoritariamente por la lucha sindical para disputar el reparto de la riqueza, asegurar el poder adquisitivo y combatir la brecha salarial. Más de la mitad de las huelgas de todo el Estado se han realizado en Hego Euskal Herria. Este apuesta sindical está dando sus frutos: las subidas salariales son mayores y se están produciendo más mejoras laborales que en el conjunto del Estado».