La web de Ekondakin, que hace un recuento diario de la actividad de la incineradora de Zubieta señala que ayer, domingo 7 de mayo, «valorizaron» energéticamente 306,96 toneladas de residuos y volvió a generar emisiones en su Línea 2, que ha sido la actividad. GuraSOS alertó a finales de abril de que la planta llevaba desde mediados de abril averiada, porque, según explicaron, «no funciona la generación eléctrica de la que se encarga un turbogenerador Siemens construido en 2018 e instalado en el verano de 2020 y unas celdas de interconexión de la generación».

El Consorcio de Residuos de Gipuzkoa, GHK, acusó a la asociación de «alarmismo», señalando que lo que había ocurrido era «una pequeña avería». Afirmaba textualmente en una nota que «hace escasos días [no mencionaba cuántos] se produjo una pequeña avería en las barras de conducción eléctrica del Complejo Medioambiental de Zubieta». Incidía en que «todas las protecciones de seguridad actuaron automáticamente y de forma inmediata. Ni el transformador principal ni el resto de la instalación eléctrica se han visto afectadas».

Después, GHK ponía especial interés en señalar que «el Complejo Medioambiental de Gipuzkoa sigue recepcionado y tratando los residuos urbanos del territorio. Asimismo, esta avería no ha producido ningún efecto negativo sobre el medio ambiente ni ha ocasionado ningún daño sobre las personas».

Pero la nota del Consorcio no desmentía el contenido de la información, cuyo núcleo era que la incineradora sufría una avería, por lo que no estaba generando energía. En la noticia ya se daba cuenta de que la planta seguía «pretratando» toneladas de residuos al día, que a su vez se iban acumulando.

Y Zabalgarbi parada también

La parada ha durado desde el 14 de abril al 6 de mayo, lo que suponen 23 días sin estar realizando su funcionamiento normal. Prácticamente también desde ese día, en concreto desde el 13 de abril, la incineradora vizcaina de Zabalgarbi está también en parada «técnica» para llevar a cabo tareas de mantenimiento.

Según publicó la pasada semana ‘El Correo’, esta situación de Zabalgarbi obliga a redirigir unas 10.000 toneladas de residuos a otras instalaciones de reciclaje o basureros que gestiona el Departamento de Sostenibilidad y Medio Natural de la Diputación de Bizkaia.

En el caso de Gipuzkoa, ni desde la Diputación ni desde GHK se ha dado cuenta de lo que ha supuesto esta parada de 23 días, de la que no se dio información alguna hasta que GuraSOS, a través de varios medios, señaló que había una avería.

Por otra parte, cabe recordar que es en las paradas y arranques de los hornos cuando mayores emisiones se producen.