Araba: ocho cuadrillas, ocho retos
El 28 de mayo los y las alavesas acudirán a las urnas para elegir a las personas que formarán las Juntas Generales. Un órgano legislativo compuesto por 51 cargos electos encargados de nombrar al próximo Ejecutivo foral. Sobre la mesa tendrá ocho retos que marcan el futuro de las ocho cuadrillas.
Los cargos electos elegidos el próximo 28 de mayo deberán responder a las demandas de los vecinos y vecinas que viven en las ocho cuadrillas que forman Araba. Siete reconocidas de forma oficial y una, Trebiñu, supeditada a las ordenes de la Junta de Castilla y León.
La integración política del enclave, el tren de alta velocidad (TAV), el desarrollo de las energías renovables, la lucha contra la despoblación, la mejora de los servicios públicos, el impulso del empleo y la resolución de diversos conflictos abiertos, entre los que se pueden resaltar la contaminación de Goiain y el futuro de Arabako Mahastiak-Viñedos de Álava, marcarán la próxima legislatura.
Gasteiz, el nudo gordiano
Gasteiz es municipio y cuadrilla. De hecho es la cuadrilla más pequeña en extensión, y la más grande en población. Supera los 250.000 habitantes, acumula el 75% de la población del herrialde, y cuenta con 39 junteros en la Cámara foral. Su posición, en el centro de Araba, le convierte en un importante nudo logístico. Un cruce de caminos donde los políticos llevan más de un década hablando del mismo tema: el soterramiento del corredor ferroviario.
El primer proyecto se presentó en 2010, hace ya trece años, y desde entonces se han sucedido las visitas protocolarias de ministros y ministras. Por Gasteiz han pasado cinco representantes del Gobierno español: José Blanco, Ana Pastor, Iñigo de la Serna, José Luis Ábalos y Raquel Sánchez. Algunos llegaron a dar detalles del coste de la obra, con cantidades que iban desde los 550 a los 872 millones de euros.
Su futuro puede que se decida en la próxima legislatura, ya que Adif adjudicó el pasado verano por 2,4 millones de euros la redacción básica. Los detalles del proyecto se podrían conocer el año que viene.
Mendialdea, molinos y paneles solares
Hablar de Mendialdea es hablar de Izki, un parque natural de más de 9.000 hectáreas repartidas entre los municipios de Bernedo, Kanpetzu y Arraia-Maeztu. Este último ha copado titulares durante los últimos meses, ya que Lakua pretende instalar en el mismo dos grandes parque eólicos, de 40 megavatios cada uno: Azazeta y Laminoria.
Ambos proyectos han sido criticados por asociaciones y formaciones políticas, que alertan de un «posible fraude de ley», por la «fragmentación de proyectos». Una «fragmentación artificial de proyectos para que todo quede en casa», indicó el pasado mes de febrero el parlamentario de EH Bildu Mikel Otero en la Cámara autonómica.
A los parques eólicos se suman los fotovoltaicos, ya que Arraia-Maeztu contará con dos parques solares. Uno de pequeño, con una potencia de 1,5 megavatios pico (MWp), situado en el polígono industrial Tellazar; y otro grande, de 40 (MW), promovido por la sociedad Aixeindar, participada por el Ente Vasco de la Energía e Iberdrola.
Añana, hacer frente a la despoblación
En la cuadrilla de Añana se ubica uno de los municipios más extensos de Araba, Gaubea. Tiene una superficie de 244,1 kilómetros cuadrados, y una población de 1.169 habitantes, lo que se traduce en una densidad de 4,9 habitantes por kilómetro cuadrado. Basta con señalar que en Bilbo viven más de 340.000 personas en 41,6 kilómetros cuadrados, 8.387,65 habitantes por kilómetro cuadrado.
La Unión Europea establece que un área geográfica está en riesgo de despoblación si se encuentra por debajo de los 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado. En el caso de Añana, además de Gaubea, hay cuatro ayuntamientos en esta situación: Kuartango (4,8), Erriberagoitia (7,22), Zambrana (10,92), y Añana, el municipio que da nombre a la cuadrilla, con 8,22 habitantes por kilómetro cuadrado.
Las Juntas Generales aprobaron en diciembre de 2021, con los votos de PNV y PSE, una norma foral que tiene por objeto favorecer el asentamiento de población en zona rural. La ley se basa en la aplicación de medidas fiscales, y los resultados han sido exiguos. Según datos de Eustat, Gaubea ganó 47 habitantes el año pasado, Kuartango once y Añana tres. Por contra, Erriberagoitia perdió diez vecinos y Zambrana seis. Unos datos que demuestran que queda mucho por hacer.
Rioja Alavesa, una nueva denominación
El vino es el gran tesoro de Rioja Alavesa, una cuadrilla situada a orillas del Ebro que cuenta con una nueva denominación de origen: Arabako Mahastiak/Viñedos de Álava.
Lakua le otorgó el pasado mes de octubre la Protección Nacional Transitoria, a la espera la aprobación definitiva por parte de Europa. Un proceso marcado por los recursos jurídicos del Consejo Regulador de la DOCa Rioja, que ha logrado que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco anule la autorización transitoria concedida por Lakua.
La próxima legislatura estará marcada por la pelea entre la Asociación de Bodegas de Rioja Alavesa, impulsora de Arabako Mahastiak/Viñedos de Álava, y la DOCa Rioja, que cuenta con el apoyo de PSE y PP. EH Bildu defiende la puesta en marcha de la nueva denominación, y el PNV, que sigue apostando por una diferenciación sin abandonar la marca Rioja.
Gorbeialdea, contaminación a orillas de Urrunaga
Seguramente, al pensar en Gorbeialdea, a muchas personas les vengan a la cabeza el verde de los bosques de Aramaio, las sendas de Sarria o las playas de Landa. Pocos serán los que piensen en el polígono industrial de Gojain, situado en Legutio, muy cerca del pantano de Urrunaga, y los peligros que guarda.
No en vano, tal como señaló el pasado 6 de marzo el alcalde, Juan Kruz, de las 285 actividades altamente contaminantes que existen en la CAV, once están asentadas en Legutio. Y son las empresas del Grupo Otua, dedicado al reciclaje de materiales industriales, las que que más quejas suscitan.
Herriak Bizirik ha denunciado ha presentado denuncias por contaminación ante la Ertzaintza, y el primer edil soberanista advirtió en su comparecencia ante las Juntas Generales de Araba de que urge actuar «con responsabilidad» para buscar soluciones «efectivas y ágiles», ya que la situación de los vecinos y vecinas de Urrunaga y Gojain es «injusta, insufrible e insostenible».
El Parlamento también ha reclamado medidas, a la espera de que las empresas muevan ficha.
Trebiñu, dar pasos en la integración política
Hace cuatro años se abrió una nueva etapa en los dos municipios que conforman el enclave: Trebiñu y Argantzon. En este último fue elegido alcalde Pablo Ortiz de Latierro, de EH Bildu, que aspira a repetir como primer edil tras las elecciones del 28 de mayo.
Tal como indicó el pasado mes de diciembre en una entrevista concedida a NAIZ, su intención es seguir trabajando para lograr la integración política en Araba del enclave, dependiente de la Junta de Castilla y León, una administración que está gobernada por la extrema derecha española.
La situación es más complicada en el Ayuntamiento de Trebiñu. El PNV perdió la Alcaldía el pasado verano, tras la ruptura del acuerdo con un grupo independiente. La ‘makila’ ha ido a parar a Adolfo Estavillo, de Ciudadanos del Condado (CDC), que tiene solo dos ediles en un pleno en el que participan seis partidos diferentes.
Lautada, problemas ante la asistencia sanitaria
La sanidad se ha convertido en una de los principales preocupaciones de la ciudadanía vasca, y en el caso de Lautada ha pasado a ser un problema acuciante que afecta los principales municipios de la cuadrilla.
Los alcaldes de Dulantzi, Asparrena, Barrundia, Donemiliaga y Zalduondo denunciaron los «recortes» en abril de 2022, alertando de que el número de profesionales del centro de salud de Agurain se ha visto «notablemente reducido». En noviembre, ante el Parlamento, indicaron que solo hay siete médicos para una población de 13.000 habitantes repartidos en ocho municipios y decenas de concejos.
El propio Departamento de Salud reconoció el año pasado la falta de profesionales sanitarios, en concreto de médicos de familia. Y ELA denunció este invierno agresiones por parte de algunas personas usuarias, «molestas por las largas listas de espera».
Aiaraldea, la recuperación de un gigante industrial
La lucha de los trabajadores de Tubacex, con factorías en Laudio y Amurrio, ha marcado la legislatura. En 2021 protagonizaron una huelga de 236 días, que finalizó el 5 de octubre tras la firma de un acuerdo que evitó el despido de 128 personas afectadas por un expediente de regulación de empleo nulo, tal como dictaminó el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.
Las movilizaciones de Tubacex suscitaron el apoyo de la ciudadanía y dieron pie a la creación de Aiaraldeko Greba Batzordea. «Pensionistas, hosteleros, trabajadoras del sector de cuidados, estudiantes, baserritarras, trabajadoras de empresa de la comarca se han levantado. En Aiaraldea se ha encendido la alerta roja. Y no nos vamos a arrodillar. De aquí en adelante solo nos queda luchar», señalaron sus integrantes en noviembre de 2021, en un acto organizado bajo el lema SOS Aiaraldea.
La movilización social ha estado acompañada de iniciativas políticas, ponencias y planes institucionales para revitalizar la cuadrilla.