El candidato de EH Bildu a diputado general de Bizkaia, Iker Casanova, propone que en la próxima legislatura se pongan en marcha procesos de deliberación sobre la transición energética en todas las comarcas vascas. Casanova ha participado en un acto junto a la candidata de la formación soberanista al Ayuntamiento de Bilbo, María del Rio, para hablar de políticas climáticas.

El aspirante a la diputación vizcaína ha afirmado que «es el momento de fijar el rumbo» porque «no hay tiempo que perder». «La respuesta desde Euskal Herria a la emergencia climática, a la crisis de la biodiversidad y a la crisis energética es, sin duda, uno de los mayores retos a los que se ha enfrentado este país en su historia», ha asegurado.

Para afrontarlo, cree que hará falta «la máxima activación de la inteligencia colectiva nunca conocida». «Necesitamos una activación sin precedentes de las capacidades científicas, institucionales y sociales de este país», ha añadido.

No obstante, ha dicho que también «será clave la participación ciudadana». «Tendremos que cambiar muchos apartados de nuestra organización social, el tejido productivo y los hábitos sociales para adaptarnos al nuevo contexto histórico, lo que requiere asentar nuevas bases para entender el desarrollo, algo que hay que hacer de forma compartida con la sociedad», ha indicado.

Por eso, ha apostado por «tomar el camino de la deliberación ciudadana». «Nuestra propuesta es que, en la primera parte de la próxima legislatura, se inicien procesos de deliberación ciudadana en todas las comarcas de Hego Euskal Herria, Tomando la transición energética como eje de estos procesos de deliberación», ha manifestado.

A su juicio, la transición energética «es un proceso que va a condicionar radicalmente el territorio» su modelo de desarrollo. «Vamos a tener que cambiar toda nuestra organización social, tejido productivo y hábitos sociales para adaptarnos al nuevo contexto histórico, lo que requiere asentar nuevas bases para entender el desarrollo; y eso hay que hacerlo junto a la ciudadanía, de forma compartida con la sociedad», ha insistido.

Para Iker Casanova, los proyectos relacionados con las energías renovables «deben ser analizados en el seno de este proceso de deliberación ciudadana». «Ya tenemos la referencia del proyecto de asamblea ciudadana del clima. Hay procesos de aprendizaje interesantes, tenemos un nivel de conocimiento suficiente para dar el salto. Creemos que es el momento de bajar la propuesta de la asamblea del clima a todas las comarcas. Los resultados de estos procesos de deliberación ciudadana marcarían el suelo y el norte de la transformación a realizar en los próximos años», ha subrayado.

Horizonte 2040 e implicación institucional

Por su parte, María del Rio ha recordado que existe «una crisis ecosocial y energética, y así les tocará vivir a las próximas generaciones». «Los niños y niñas que hoy se pongan en pie y estén dando sus primeros pasos, llegarán a la mayoría de edad en 2040. La crisis ecológica va a condicionar totalmente sus formas de vida, no hay duda», ha explicado.

En su opinión, «lo que está en juego es la cuantía y la cualidad de este condicionamiento, en gran medida en los próximos años». «Para 2040 Euskal Herria se transformará profundamente a muchos niveles. En eso tampoco hay duda. Se avecinan grandes cambios que afectarán a muchos ámbitos de nuestra organización social. Lo que está en juego es el rumbo de ese cambio, en los próximos años», ha indicado.

Del Rio pretende que se haga «partícipes a la ciudadanía de los procesos que han condicionado el bienestar, poniendo los medios para ello desde las instituciones públicas». «Y si hay un proceso que condicione nuestro bienestar en los próximos años, eso es la transición energética. La gobernanza colaborativa no puede ser marketing político», ha subrayado.

En su opinión, «no es de recibo pedir a los ciudadanos que voten cada cuatro años para tomar decisiones después a sus espaldas». «Si EH Bildu ocupa responsabilidades de gobierno en las principales instituciones, en la primera parte de la próxima legislatura pondrá en marcha procesos deliberativos ciudadanos en todas las regiones, en los que se analizarán los proyectos relacionados con las energías renovables», ha concluido.

Vitero: Ayudas, rehabilitación, electrificación...

EH Bildu ha presentado este martes también en Gasteiz sus medidas en este terreno, con el objetivo de convertir esta ciudad y el conjunto de Araba en «referentes de la lucha contra el cambio climático y la descarbonización de la economía». La candidata a alcaldesa, Rocío Vitero, plantea para ello un plan «para ayudar a las empresas a reorientar su actividad, o nuevas asesorías energéticas para particulares, empresas y servicios».

Otra medidas que la coalición propone para afrontar el reto de la transición energética como son la rehabilitación de viviendas para ahorrar energía, electrificación de la flota de transporte público, y extender las comunidades energéticas a todos los barrios para crear energía limpia.

Vitero ha recordado que «hace ya cuatro años EH Bildu fue pionera y propuso un plan para descarbonizar Gasteiz».

Aznal: «Cambios de hábitos»

La candidata de EH Bildu a la Presidencia de Nafarroa, Laura Aznal, también ha abordado este tema este martes al apostar por «una transición energética y ecológica justa y democrática», dada la «grave situación de crisis» que evidencian los incendios del pasado verano y la sequía actual

Por ello, ha expuesto diferentes medidas que EH Bildu lleva en su programa, tendentes a «promover cambios en los hábitos y los modos de producción para disminuir el consumo, con la reutilización, el reciclaje y la revalorización como ejes fundamentales».

El «desarrollo democrático de las energías renovables» con el impulso de comunidades energéticas locales para el autoabastecimiento, o la intervención en el mercado energético para cambiar el modelo de fijación de precios son otras de las propuestas, junto a la del desarrollo «integral y con ambición» de la Ley de Cambio Climático.

Estas medidas tienen «un objetivo claro: garantizar precios justos y asequibles de la energía a toda la ciudadanía, autónomos y empresas», ha dicho Aznal, quien también ha propuesto la creación y puesta en marcha de la Agencia Energética pública para contar con «una planificación ordenada y equilibrada» y con «criterios medioambientales claros».