Sabido es que Bilbao Basket busca ir ganando en estabilidad después de una década especialmente tumultuosa en la que se ha rozado la desaparición del club y se le ha tenido que dar la vuelt aa un descenso deportivo. Por eso es que, después de acabar la etapa con Álex Mumbrú al frente del banquillo bilbaino, la entidad que preside Isabel Iturbe fichó a Jaume Ponsarnau hasta 2024.

Pero después de esta primera temporada, en la que Surne Bilbao Basket ha terminado duodécimo con 14 victorias, peleando por meterse en la Copa en la primera vuelta, luchando hasta el Top 16 de la FIBA BCL y en la propia Liga ACB para poder regresar a Europa la próxima campaña pese a estar muy coartado por las lesiones, el club vizcaino ha decidido depositar su confianza un año más en el preparador catalán, por lo que permanecerá al frente del banquillo de los hombres de negro hasta 2025, en lo que pretendería ser el inicio de una etapa de consolidación.

«Estamos satisfechos del trabajo de Jaume y cómo ha funcionado al equipo, y cómo él se ha implicado y se ha adaptado al trabajo del club», ha indicado el director deportivo Rafa Pueyo, que ha hecho las veces de representantes de la directiva del club.

«Estoy muy agradecido por la confianza del club para seguir; al trabajo de los jugadores que han estado esta temporada. Todo los miembros del staff. He tenido un contexto muy positivo de trabajo, de entorno, en el que me he sentido muy bien», ha indicado un Jaume Ponsarnau agradecido.

«En la vida hay cosas más importantes antes que la profesión. Mi familia está muy contenta de que yo esté aquí, les encanta venir a esta ciudad maravillosa. Eso aún reconforta más. Podemos hacer un buen trabajo. Hay cosas que han salido bien y otras no, pero esto no se acaba. Seguir trabajando juntos nos puede permitir conseguir más cosas. Por eso afrontamos este reto de seguir aquí», ha añadido el preparador targarino.

Rejuvenecer el equipo

Luego de concretar una renovación presentada como «la primera rueda de prensa de la temporada 2023/24», Ponsarnau y Pueyo han indicado que la idea de conformar el plan tel de la próxima campaña es en base a «rejuvenecer» su plantel, pese al mensaje de continuidad que ha enviado Ponsarnau.

«Espero un crecimiento deportivo. Si hay unos mínimos de continuidad en cuanto a jugadores, al final eso nos tiene que llevar para aprovechar el trabajo hecho y seguir mejorando. La temporada ha sido buena, y hemos tomado nota para hacerlo mejor. No sabemos si vamos a jugar en Europa, pero tenemos la fuerza para volver a conseguirlo y ese es el reto», ha indicado.

En todo caso, en esa ansia de fiichar a jugadores más jóvenes se desprenden los motivos de la «limpia» anunciada el lunes de que Goudelock, Kyser, Francis Alonso, Radicevic y Agustín Ubal –aunque en el caso del uruguayo se trata del final de su cesión por parte del Barça– no continuarán en la capital vizcaina.

«Por otro lado, había cosas que tenían que cambiar porque veíamos que había puntos de crecimiento. No se trata de que estemos descontentos con ellos; les deseamos lo mejor porque han hecho un gran trabajo, pero queremos continuar, empezando con la continuidad y en busca de unos valores que nos hagan más competitivos», ha insistido el entrenador de Tàrrega.

La rueda de prensa no ha buscado ahondar mucho más, ya que los fichajes llegarán en función de qué jugadores van a continuar en Bilbo en de cara a la temporada próxima y como bien ha indicado Rafa Pueyo, «a día de hoy solo Hakanson, Reyes y Rabaseda tiuenen contrato. Con Tomeu Rigo estamos contentos y queremos que siga, y esperamos que tenga más suerte con las lesiones».

No ha querido añadir nada más en los casos referentes a Jeff Withey, Adam Smith, Emir Sulejmanovic o Giorgios Tsalmpouris. Sí que ha admitido que «hay interés que varios de ellos puedan continuar», pero ha recordado que «las ligas aún no han terminado y es pronto para que los jugadores acepten ofertas».

«Están en su derecho de mirar el mercado, pero una cosa es el interés y la certeza de que están contentos aquí, y otra que el mercado les pueda poner en una situación de prácticamente tener que irse», ha avisado Rafa Pueyo.