La Audiencia Nacional ha condenado a 20 años de cárcel a Carmen Gisasola por la muerte de un agente de la Policía española en atentado de ETA en Galdakao en abril de 1990. En cambio, ha absuelto a los otros dos enjuiciados en la causa, Oskar Abad y José Ramón Martínez. 

Los tres habían sido juzgados y absueltos por esta causa, al entender la Audiencia Nacional que los hechos habían prescrito. Sin embargo, el Tribunal Supremo anuló la sentencia y ordenó repetir el juicio con otro tribunal, al considerar que la AN «erró» al aplicar la prescripción. La Fiscalía reclamaba 30 años de prisión para cada uno.

Ahora, la Sección Segunda de la Sala de lo Penal ha dictado una nueva sentencia en la que condena a Gisasola a la pena de 20 años y 1 día como «cooperadora necesaria de un delito de asesinato con finalidad terrorista» y al pago de diferentes cantidades a las 60 personas perjudicadas por los daños causados por la explosión del artefacto explosivo.

Acuerda asimismo la aplicación de la atenuante de dilaciones indebidas puesto que los hechos sucedieron hace más de 33 años y la reapertura del procedimiento se produjo hace una década, aunque no detalla su alcance.

La AN ha absuelto a Oskar Abad y José Ramón Martínez, al considerar que no se pueden utilizar las declaraciones autoinculpatorias que efectuaron en sede policial al no contar con prueba de cargo que acredite su participación en el atentado.

Recurso ante la misma Sala que anuló la absolución

La sentencia de la AN se pude recurrir ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo, la misma que anuló la absolución y ordenó repetir el juicio.

Gisasola, Abad y Martínez están actualmente en libertad. La primera estuvo 24 años encarcelada y se acogió a la denominada «vía Nanclares», mientras que los basauriarras Martínez y Abad recobraron la libertad en 2009 y 2012, tras 18 y 21 años de prisión, respectivamente.