En 2018, Dorota Kobiela y Hugh Welchman, hicieron que ‘Loving Vincent’ se convirtiera en un fenómeno internacional del cine de animación, consiguiendo nominaciones en los más importantes y prestigiosos premios de la industria cinematográfica.

En aquella cinta crearon una historia fascinante en torno a Vincent Van Gogh, en la que cada fotograma que componía el filme era en realidad un cuadro pintado sobre óleo, tal y como el propio artista lo hubiera hecho.

Sus 80 minutos de duración estaban compuestos por 56.800 fotogramas que habían sido pintados, uno a uno, por una gran cantidad de excelentes pintores a lo largo de varios años.

Ahora, el mismo equipo regresa con otro proyecto fascinante y artesanal titulado ‘Los campesinos’, el cual ha sido creado mediante la misma técnica con la que ‘Loving Vincent’ dio vida a las pinturas de Van Gogh.

Cuadros de estilo realista y pre-impresionista

60 artistas pertenecientes a diferentes estudios de Polonia, Serbia y Ucrania han llevado a cabo esta nueva y titánica empresa que ha sido producida por Sean Bobbit y Hugh Welchman, que también es codirector y coguionista.

Dorota Kobiela firma una historia basada en la novela del mismo título escrita a principios del siglo XX por el autor ganador del premio Nobel de Literatura Wladyslaw Reymont.

La película cuenta la historia de Jagna, una joven de familia humilde obligada a casarse con un rico granjero mucho mayor que ella, a pesar de estar enamorada de su hijo Antek. Con el tiempo Jagna se convierte en el centro de las envidias y el odio de todos en la comunidad y debe luchar por mantener su independencia en un lugar marcado por las estrictas reglas y la tradición.

Con un amplio repertorio de cuadros de estilo realista y pre-impresionista pintados uno a uno, ‘Los campesinos’ reproduce el ambiente local de la campiña polaca a finales del siglo XIX y comienzos del XX tal como lo describe Wladyslaw Reymont en la novela original.