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Aita Mari rescata a 69 migrantes y se les asigna primero Génova y luego Nápoles

69 migrantes que viajaban en dos barcazas, entre ellos un bebé y varios menores de edad, han sido rescatados por el Aita Mari en alta mar en el Mediterráneo Central. Por otro lado, una sentencia ha anulado la detención de cinco migrantes en el sur de Italia, contradiciendo las normas de Meloni.

Una de las barcazas llenas de migrantes hallada por Aita Mari, en esta pasada noche.
Una de las barcazas llenas de migrantes hallada por Aita Mari, en esta pasada noche. (@JaviBernardoP (@maydayterraneo))

El antiguo atunero vasco Aita Mari ha rescatado esta noche de jueves a 69 migrantes en alta mar en el Mediterráneo Central, entre los que hay un bebé y varios menores de edad. Según los datos existentes, viajaban en dos barcazas.

 

Según ha denunciado la ONG Salvamento Marítimo Humanitario a través de redes sociales, «se nos ha asignado el puerto de Génova, a unos 900 kilómetros», dentro de la política de obstaculización de rescates agudizada por el Gobierno de ultraderecha que lidera Giulia Meloni. «Es la primera vez que dan un puerto tan lejos a un barco de nuestra eslora», explican desde el Aita Mari. No obstante, más tarde se ha producido una modificación y parece ser que finalmente podrán desembarcar en Nápoles, más cercano.

 

En un vídeo grabado en el buque, el capitán del Aita Mari había denunciado las consecuencias de la decisión del Gobierno italiano de obligarles a navegar 900 kilómetros.

La situación se complica por la previsión de olas de dos metros en esa zona. «Y, sobre todo, va en contra del derecho marítimo internacional».

En la primera evaluación médica a los migrantes rescatados, se perciben traumas sicológicos por las horas que llevaban a la deriva.

El buque Aita Mari zarpó hace tres días en su undécima misión humanitaria hacia el Mediterráneo Central. En su anterior misión rescató la vida de 294 personas.

Sentencia contra Meloni

El Tribunal de la ciudad siciliana de Catania, en el sur de Italia ha anulado este viernes la detención de cinco migrantes en un centro de acogida, días después de que otra sentencia similar desencadenara un cruce de acusaciones entre el poder judicial italiano y el Gobierno liderado por la ultraderechista Giorgia Meloni.

La sentencia no valida la detención de cinco inmigrantes en un centro de Pozzallo, que fue ordenada por un comisario, y contradice las últimas normas decretadas por Meloni para ampliar el plazo de detención de los solicitantes de asilo y los trámites para su eventual expulsión en caso de que se rechace.

Hace unos días la primera ministra italiana se mostró «estupefacta» por otra decisión del mismo tribunal que dejó libres a varios inmigrantes de un centro de acogida.

Esa sentencia, decidida por la jueza Iolanda Apostolico, cuestionó el nuevo procedimiento de internamiento y la fianza de 5.000 euros que hay que pagar para salir de los centros, al considerar ilegítimo tener encerrados a migrantes que han pedido el estatus de asilo, amparándose en el artículo 10 de la Constitución italiana.

Como respuesta a esta decisión, el vicepresidente del Gobierno italiano, el también ultraderechista Matteo Salvini, divulgó un vídeo en el que se ve a la jueza en una manifestación de 2018 contra las políticas de puertos cerrados a las naves humanitarias y la acusó de estar politizada.