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Ascienden a 9.000 los muertos por los bombardeos israelíes en Gaza

La cifra de víctimas en Gaza asciende a más de 9.000 muertos y 32.000 heridos desde el 7 de octubre. La infraestructura médica del enclave se encuentra al borde del colapso, con al menos 16 hospitales fuera de servicio. 

Palestinos hacen cola para comprar pan frente a una panadería parcialmente destruida por un ataque israelí en Nuseirat.
Palestinos hacen cola para comprar pan frente a una panadería parcialmente destruida por un ataque israelí en Nuseirat. (Mahmud HAMS | AFP)

Más de 9.000 personas han perdido la vida y aproximadamente 32.000 han resultado heridas en Gaza desde desde el pasado 7 de octubre, según informó ayer el Ministerio de Sanidad gazatí. Su portavoz, Ashraf al Qudra, detalló en una rueda de prensa que entre los fallecidos hay 3.760 menores y 135 profesionales sanitarios.

La devastación en el enclave no se limita a las vidas humanas, ya que la infraestructura médica también ha sufrido un impacto grave: un total de 16 hospitales han quedado fuera de servicio y 25 ambulancias han sido destruidas, según el Ministerio gazatí de Sanidad. En este sentido, Al Qudra hizo un llamamiento urgente a todas las partes involucradas para garantizar el paso seguro de la ayuda médica y advirtió sobre la inminente amenaza de una crisis sanitaria ante la inminencia de la interrupción del funcionamiento de los generadores del hospital Al Shifa.

Entre los hospitales afectados se encuentra el Hospital de la Amistad Turco-Palestina, el único en Gaza que brinda tratamiento a pacientes con cáncer que cesó sus operaciones debido a la falta de combustible y daños causados por los recientes ataques israelíes, según informó el Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), por su parte, señaló que está haciendo todo lo posible para que los centros hospitalarios en la Franja de Gaza sigan funcionando y atendiendo los casos más urgentes, así como para establecer un sistema que permita detectar rápidamente cualquier brote epidémico. Sin embargo, aclaró que es ilusorio pensar que unas cuantas instalaciones sanitarias de emergencia pueden cubrir siquiera el mínimo de los servicios sanitarios de más de dos millones de gazatíes, encerrados bajo las bombas.

A pesar de las llamadas internacionales para un alto el fuego, los ataques israelíes continúan y la población de Jabalia sigue atrapada en una pesadilla interminable. Según UNRWA, al menos 20 personas murieron ayer en en el tercer ataque contra el campo de refugiados más grande, donde el número de muertos ha aumentado a 210 tras los ataques del martes y miércoles.

Además, al menos 15 personas murieron en otro bombardeo israelí contra un edificio residencial en el campo de refugiados de Bureij, en el centro de Gaza y donde decenas de personas permanecían ayer atrapadas bajo los escombros.

«Nada nos detendrá»

Según el medio israelí ‘Haaretz’, el primer ministro, Benjamin Netanyahu, indicó a los soldados de las unidades especiales que «estamos progresando» en referencia a la ofensiva terrestre que el Ejército israelí está llevando a cabo sobre el enclave, que ha dejado hasta el momento 18 soldados israelíes muertos. «También tenemos pérdidas dolorosas, pero quiero dejar una cosa clara: nada nos detendrá», añadió.

De esta manera, el Ejército israelí rodeó y atacó ayer el interior de la ciudad palestina de Gaza, principal urbe del enclave. El Jefe del Estado Mayor de las FDI, Halevi, confirmó que Israel está operando con menos de la mitad de los efectivos de la fuerza aérea en Gaza, y amenazó con atacar otros frentes si fuese necesario.

Todo ello mientras continuaban los intercambios de fuego entre el Ejército israelí y milicias en el sur del Líbano con el disparo de más proyectiles y misiles antitanque desde el país árabe y ataques israelíes, incluyendo contra objetivos de Hizbulah, en la víspera del discurso de Seyyed Hassan Nasrallah, el primero desde la escalada entre el grupo chií libanés e Israel.

En Cisjordania, el número de palestinos muertos por disparos del Ejército de ocupación en una serie de operaciones llevadas a cabo ayer ascendió a tres, entre ellos dos menores, según denunciaron las autoridades palestinas. Así, ascienden a 342 los palestinos muertos en Cisjordania en lo que va de año, incluidos 134 desde el 7 de octubre.

«Pausas» para evacuar

El presidente estadounidense, Joe Biden, se pronunció por primera vez a favor de una «pausa» humanitaria en un acto de recaudación de fondos para su campaña en Minneapolis. «Necesitamos una pausa. Una pausa significa dar tiempo para sacar a los prisioneros», señaló tras ser interrumpido por la rabina Jessica Rosenberg y pedir un alto el fuego. EEUU fue uno de los 14 países de las Naciones Unidas que votó «no» a una resolución de la Asamblea General que pedía un «alto el fuego».

En esa misma línea, John Kirby, un portavoz de la Casa Blanca, indicó en una rueda de prensa que la Administración estadounidense respaldaría «pausas humanitarias». tanto para la entrada de material en el enclave como para la salida de los retenidos.

En el segundo día de apertura del cruce de Rafah para heridos y personas con pasaporte extranjero,  al menos 342 personas con ciudadanía extranjera cruzaron ayer a Egipto por el cruce fronterizo de Rafah, junto a 20 heridos y 20 cuidadores, mientras que solamente 45 camiones con ayuda humanitaria pudieron entrar en el enclave.De este modo, el Gobierno de Egipto afirmó que ayudará a evacuar Gaza a «unos 7.000» ciudadanos con pasaporte extranjero.

Reacciones

La masacre de Gaza sigue elevando el rechazo de países árabes que dieron pasos en la normalización de relaciones con Israel. Ayer, el Consejo de Diputados de Bahréin indicó que «ha decidido devolver» a su embajador en Israel y anunció la suspensión de las relaciones económicas. El Gobierno bareiní no comentó el comunicado, pero sería la primera vez que un Estado signatario de los Acuerdos de Abraham interrumpe sus relaciones con Israel.

Otro de los firmantes, Marruecos, denunció ayer «la inacción de la comunidad internacional» para poner fin a la «desastrosa» situación que se vive en Gaza con los ataques israelíes, que son, afirmó, «incompatibles con el Derecho internacional».

Pese al vago consenso sobre las resoluciones de la ONU, cada Estado de la UE mantiene su propia posición. Alemania, que cerró filas con Tel Aviv, anunció la prohibición de las actividades de Hamas y de la red palestina de apoyo a presos Samidoun.