El Parlament de Catalunya ha pedido hoy con una declaración de la Junta de Portavoces la libertad de los periodistas Pablo González y Julian Assange, en un texto que «denuncia y condena» y pide que se investiguen los asesinatos de periodistas y defiende los derechos profesionales del periodismo y la libertad de prensa como «garantía de una democracia de verdad».

El texto de la declaración, firmada por JxCat, ERC, la CUP y ECP, apunta que «el periodismo sufre una persecución nunca vista a nivel internacional». Han recordado que «un periodista es asesinado cada cuatro días a manos de gobiernos y otros grupos de poder» y que «solo en el 13% de los casos de asesinato se llega a abrir una investigación».

Además, han citado otros «múltiples abusos» como la «censura y autocensura, contratos precarios, despidos improcedentes, agresiones, acoso o multas».

La declaración ha puesto el acento sobre los casos de Pablo González y Julian Assange, que «indican situaciones aún más graves, como la privación de libertad durante muchos años solo por haber ejercido su profesión con rigor».

Un ataque a la libertad de prensa

En el caso del periodista vasco, el Parlament de Catalunya ha pedido «que se respeten todas las garantías jurídicas y procesales» y que «se le ponga en libertad inmediatamente». «Lleva más de un año y medio en prisión en Polonia por haber ejercido su profesión: es un caso clarísimo de ataque a la libertad de prensa y a la libertad de expresión», apunta la declaración aprobada.

Con respecto a Assange, la Cámara catalana ha recordado que puede ser extraditado en breve hacia EEUU «simplemente por haber cumplido su deber periodístico de informar». Así, el Parlament subraya que «Assange no debería estar en prisión» y ha vuelto a pedir su «libertad incondicional e inmediata» tal y como ya hiciera con otra declaración aprobada en 2020.

Asimismo, se ha manifestado en contra de la extradición de Julian Assange. «El Parlament de Catalunya se manifiesta en defensa de los derechos profesionales del periodismo y en favor de la libertad de prensa como garantía de una democracia de verdad».