Los crecientes rumores sobre un posible acuerdo para la liberación de rehenes en manos de milicias palestinas de Gaza no suponen ningún cambio en el escenario de horror que vive el territorio palestino y en las matanzas diarias bajo las bombas de Israel.

Fuentes israelíes citadas por la televisión Canal 12 señalaron que el Gobierno «entiende que se ha reabierto la ventana de oportunidad y que los próximos días serán claves».

El acuerdo incluiría la liberación de medio centenar de niños y mujeres a cambio de un centenar de presos palestinos, una pausa de cinco días en los combates en los que, además, Israel no podría utilizar sus drones de vigilancia.

El presidente de EEUU, Joe Biden, que la semana pasada, en alguno de sus «lapsus», había dejado deslizar avances en las negociaciones, reiteró ayer que cree que un acuerdo para liberar rehenes está cerca.

Su impresión se suma a la del primer ministro qatarí, Mohammed bin Abdelrahman Al-Thani, que el domingo afirmó que la liberación depende ya solo de cuestiones prácticas «menores».

Además, la presidenta del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Mirjana Spoljaric, viajó a Qatar para mantener contactos con el jefe político de Hamas, Ismael Haniye

En Gaza, el escenario estaba ayer lejos de cualquier «pausa» e Israel va extendiendo su ofensiva de hospital en hospital, convertidos en objetivos.

Ya son 13.300 las personas que ha matado en 45 días –5.600 de ellas niños– y la destrucción de viviendas e infraestructuras apunta a un plan para vaciar la Franja.

En este intento, al menos 12 personas, entre heridos y personal médico, murieron ayer en ataques directos del Ejército israelí al hospital Indonesio, ubicado cerca de Yabalia, en el norte de la Franja. Una cifra de víctimas provisional, ya que varios edificios quedaron totalmente destruidos.

Miles de heridos, personal médico y personas desplazadas que intentan refugiarse en el centro fueron atacados con artillería mientras los tanques avanzaron con la intención de rodearlo.

Israel ha atacado varios hospitales y ambulancias en las últimas semanas, con el argumento de que en ellos se escondían milicianos de Hamas y sus centros de mando, lo que no ha demostrado. Vídeos difundidos por el Ejército sobre supuestos túneles hallados en las inmediaciones no han podido ser verificados.

Esta estrategia fuerza la evacuación de los hospitales  y está acabando con todos los servicios sanitarios en el norte de Gaza, lo que impulsa el desplazamiento de población y el vaciado de facto de la zona.

Ataque al Hospital Indonesio

El Gobierno indonesio condenó «con la mayor firmeza» el ataque de Israel al hospital construido por su país, una «clara violación de las leyes humanitarias internacionales», y pidió a todos los países «que tienen relaciones cercanas con Israel» que utilicen su influencia para que pare sus atrocidades. La ministra de Exteriores indonesia, Retno Marsudi, pidió asimismo un alto el fuego en Gaza junto a los cancilleres de China, Arabia Saudí, Egipto y Jordania en un encuentro en Pekín.

El Ejército de Israel sostiene que el Hospital Indonesio era usado por Hamas con fines militares y que hay una red de túneles debajo de las instalaciones, algo que fue negado por las autoridades del país asiático y por el Comité Médico de Rescate de Emergencia (MER-C), la organización que financia el hospital.

Las autoridades de la Franja alertaron de que no hay garantías sobre corredores seguros para evacuar a los pacientes y  que «la ocupación podría cometer cualquier estupidez contra los que están siendo evacuados del Hospital Indonesio». Poco después anunció el comienzo de la salida de cien pacientes.

El Gobierno gazatí denunció que Israel busca «convertir el hospital en una base militar tras sus crímenes en el Hospital Al Shifa», escenario de un cerco y varios asaltos por parte de las tropas israelíes durante la semana pasada. Así, recalcó que «la ocupación podría usar a los heridos como escudos humanos, como hizo en el Hospital Al Shifa», donde todavía se encuentran retenidas 700 personas, incluidos cerca de 260 heridos y enfermos «en una situación trágica, sin agua, electricidad o comida» y con más de cien pacientes que necesitan cirugías urgentes, con un personal médico limitado. «Muchos intentaron abandonar el hospital y fueron atacados», señaló.

Pero la agresión a centros hospitalarios que vulnera el derecho internacional también se está llevando a cabo en el sur de la Franja.

Al menos 70 palestinos murieron el domingo a causa de un bombardeo ejecutado por el Ejército de Israel en los alrededores del Hospital Naser, situado en Jan Yunis y en el que trabajan equipos de Médicos Sin Fronteras (MSF).

Además, llegaron otras 122 personas heridas, incluidos muchos niños en estado crítico con graves quemaduras lo que hizo que tuvieran que esperar a ser operados, según relato MSF, que exigió garantías básicas de seguridad y acceso sin restricciones de suministros médicos y humanitarios, pero sobre todo «un alto el fuego para detener este derramamiento de sangre».  Otra de las clínicas de MSF en Ciudad de Gaza fue atacada y se vio en vuelta en llamas. Todos sus vehículos, los únicos con los que podrían evacuar el lugar, fueron destruidos.

António Guterres sentenció que «estamos siendo testigos de una matanza de civiles que no tiene paralelismo ni precedentes en ningún otro conflicto desde que soy secretario general» de la ONU.

Contención diplomática

A pesar de la magnitud de la destrucción de Gaza y del número de víctimas, la reacción internacional sigue mostrando, en general, contención en sus expresiones. En una conversación telefónica, el presidente chino, Xi Jinping, coincidió con su homólogo francés, Emmanuel Macron, en que «la prioridad es evitar un mayor agravamiento del conflicto palestino-israelí, en particular la aparición de una crisis humanitaria más grave». Ambos mostraron su acuerdo con respecto a la «solución fundamental de dos Estados».

La llamada entre Macron y Xi se produce el mismo día en el que ministros árabes y musulmanes pidieron en Pekín un alto el fuego inmediato en Gaza, llamamiento al que se sumó el canciller chino, Wang Yi, que recibió a su homólogo palestino, Riyad al-Maliki. En la reunión estuvieron también presentes los cancilleres de Arabia Saudí, Egipto, Indonesia y Jordania. Por su parte, el Gobierno de Irán pidió a Rusia un papel más activo y esfuerzos importantes para evitar una limpieza étnica en Gaza y Cisjordania. Según Moscú, en una conversación telefónica, el ministro de Exteriores iraní, Hosein Amirabdolahian, y su homólogo ruso, Sergei Lavrov, coincidieron en «la necesidad de un alto el fuego y la entrega de ayuda a la población civil afectada cuanto antes». Las reacciones diplomáticas que se salen de esta contención son respondidas rápidamente por Israel, que ayer llamó a consultas a su embajador en Sudáfrica, país que ha pedido a la Corte Penal Internacional que investigue a Israel por crímenes de guerra. El gobernante Congreso Nacional Africano pedirá en el Parlamento el cierre de la Embajada de Israel.

Hospital

Camiones con ayuda humanitaria y equipos para instalar un hospital de campaña jordano entraron ayer a Gaza. Llevaron  50.000 litros de combustible frente a los 160.000 diarios necesarios para hospitales, panaderías y plantas potabilizadoras.

Líbano

El Ejército de Israel atacó con tanques, un avión de combate y un helicóptero objetivos de Hizbulah en respuesta al lanzamiento de múltiples proyectiles desde Líbano, que causaron un incendio en una base militar, en un nuevo día de intercambios de fuego en la zona fronteriza.

Irán

Irán se desvinculó del apresamiento del buque mercante Galaxy Leader, de una empresa propiedad de un británico-israelí, apresado en el mar Rojo por los hutíes de Yemen. «Los grupos de resistencia se representan a sí mismos y a sus respectivas naciones», señaló Teherán.

Ebakuatutako haurrak, egoera kritikoan

Igandean Gazako Zerrendatik Egiptora eraman zituzten 28 haurtxo goiztiarrak egoera kritikoan daude Sinai Iparraldeko zenbait ospitaletan, eta haien egoerak Kairoko beste zentro batzuetara eramatea eragozten du. Al Arisheko Ospitalean –Gazako mugatik 30 bat kilometrora– 16 haurtxo daude, eta gainerakoak inguruko beste zentro batzuetara bideratu zituzten. Jaioberriak atzo iritsi ziren Egiptora, baina sartu aurretik hiru hil egin ziren, leku arriskutsuetan sei anbulantziatan eramateko ahaleginetan, Israelek behartutako lekualdatzearen ondorioz. Aurretik, 31 haurtxoak oso gaixo zeuden Al Shifako ospitalean. Han beste 22 jaioberri hil ziren Israelgo Armadaren setio eta erasoengatik. Al Shifa «heriotza gunea» izendatu zuen ebakuazioan parte hartu zuen Munduko Osasun Erakundeak.