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Jon Rahm deja la PGA y se suma al LIV Golf, y admite que el dinero ha sido una de las razones

Jon Rahm se incorpora al LIV Golf, la liga de golf financiada por el Gobierno de Arabia Saudí con un contrato que se estima que rondará los 500 millones de dólares. Hace un año, el de Barrika declaró que no le atraía el proyecto saudí y que su vida «no cambiaría con 400 millones de dólares más».

Jon Rahm, en el Open Británico.
Jon Rahm, en el Open Británico. (Glyn KIRK | AFP)

El vizcaino Jon Rahm dejó este jueves la PGA para incorporarse al LIV Golf, la liga de golf financiada por el gobierno de Arabia Saudí, con un contrato cuyas condiciones económicas no han sido reveladas, pero que se estima por encima de los 500 millones de dólares.

«LIV Golf anunció hoy que el dos veces ganador de ‘majors’, el vigente campeón del Masters de Augusta, se sumó al LIV Golf. Rahm competirá en la liga del LIV Golf a partir de la próxima temporada, que arranca el 2-4 de febrero de 2024 en el LIV Golf Mayakoba, México», informó la liga de golf en un comunicado.

Rahm, de 29 años, llegará al LIV en calidad de campeón del Masters de Augusta y se suma a estrellas del golf como Sergio García, Dustin Johnson, Brooks Koepka o Phil Mickelson.

En junio de 2023, LIV Golf, PGA Tour y PGA European Tour anunciaron que habían iniciado un proceso de fusión que todavía no ha acabado.

«Estoy orgulloso por sumarme al LIV Golf y formar parte de algo nuevo que está haciendo crecer este deporte. No tengo dudas de que esta es una gran oportunidad para mí y mi familia y estoy muy ilusionado por el futuro», dijo Rahm en declaraciones facilitadas por la liga de golf saudí.

«Esta decisión fue por muchas razones que pensé que era lo mejor para mí», dijo el golfista, según ESPN, uno de los medios que asistió a una videollamada este jueves con el campeón del Masters de Augusta de este año.

«No me malinterpretes, es un gran acuerdo. Tenía una oferta realmente buena frente a mí y es una de las razones por las que la tomé. Realmente me pusieron en una posición en la que tuve que pensar sobre ello y lo hice», añadió.

El contrato de Rahm será uno de los más ricos de la historia del deporte y, aunque los detalles económicos no han sido especificados, todo apunta a que sus ingresos superarán los 500 millones de dólares.

«Cuando vi a Jon por primera vez, a los 17 años, me di cuenta de que el mundo del golf estaba a punto de asistir al nacimiento de una estrella. Jon ha demostrado repetidamente que es uno de los mejores jugadores del mundo», dijo Greg Norman, consejero delegado del LIV.

La noticia de la incorporación de Rahm al LIV llega de forma sorpresiva. En el pasado, el de Barrika había declarado que no le atraía el proyecto de la liga saudí y que su vida «no cambiaría lo más mínimo con 400 millones de dólares más».

Al mismo tiempo, Rahm destacó que no cuestionaba las decisiones de vida de los demás golfistas.

El LIV Golf fue creado en 2021 con la aspiración de rivalizar en notoriedad y prestigio con la PGA, y con unos premios económicos enormes como principal aliciente para los jugadores.

El hecho de que varias leyendas de la PGA se sumaran al LIV provocó una auténtica guerra civil en el mundo del golf.

El norirlandés Rory McIlroy rechazó las suculentas ofertas del LIV y nunca escondió su «odio» por la nueva liga. Tiger Woods también se negó a sumarse al proyecto saudí.

El LIV Golf

El LIV Golf arrancó en 2022 con la intención de rivalizar en calidad y prestigio con el PGA Tour.

¿Su principal baza? El gigantesco músculo financiero del Fondo de Inversión Pública (PIF) de Arabia Saudí, que tentó con muchos ceros en la cuenta bancaria a los golfistas que cambiaran de bando.

Una muestra de la monstruosa cantidad de dinero que maneja el LIV Golf fue que en la lista de Forbes de 2023 de los diez deportistas mejor pagados del mundo (del 1 de mayo de 2022 al 1 de mayo de 2023) se colaron dos golfistas del nuevo tour: Dustin Johnson en sexta posición con 107 millones de dólares y Phil Mickelson en el séptimo puesto con 106 millones.

Otro ejemplo es que el LIV Golf prometió este año 4 millones de dólares para el ganador de uno de sus torneos y 3 millones para el equipo vencedor.

Como comparación, Rahm, que se proclamó este año vencedor del legendario Masters de Augusta, ‘solo’ se llevó 3,24 millones de dólares por vestirse con la chaqueta verde.

Al margen del dinero, la competición por equipos es una de las novedades que el LIV Golf ha planteado en el campo. Otro aspecto importante es que cada torneo se juega a tres rondas y sin corte del fin de semana, un apunte nada menor, ya que, con presentarse, un golfista se lleva como mínimo 120.000 dólares.

El LIV Golf se juega en diferentes campos de todo el mundo. El calendario de 2024, presentado recientemente, cuenta con 12 citas y comenzará el 2 de febrero con un torneo en El Camaleón Golf Course de Playa del Carmen (México).

Habrá también cinco paradas en Estados Unidos, en ciudades como Las Vegas o Houston, además de eventos en el Estado español (Real Club Valderrama en Andalucía), Australia, Hong Kong, Singapur, Reino Unido y, por supuesto, Arabia Saudí.

Después de esas 12 citas se disputarán los campeonatos individuales y por equipos en otros dos fines de semana, ambos todavía sin ubicación confirmada.

Talor Gooch fue el vencedor individual en la temporada 2023 mientras que los Crushers GC, con Bryson DeChambeau como capitán, resultaron campeones en la competición por equipos.

En cualquier caso, no es todo oro lo que reluce en el LIV Golf, que, por ejemplo, ha sido incapaz de obtener una exposición mediática o repercusión deportiva al nivel de semejante inversión.

Además, sus triunfos no cuentan para la clasificación mundial del golf y sus torneos carecen de la tradición y el componente histórico que se le presuponen a algunas de las citas del PGA Tour.

La turbulenta relación con el PGA Tour

Con todo ello, la aparición del LIV Golf separó en dos bandos de forma totalmente dramática al mundo del golf y el PGA Tour sancionó a los ‘desertores’ y se enfrentó en los tribunales y los medios al tour saudí.

El circuito con base en EEUU recibió denuncias por monopolio mientras que el LIV Golf fue acusado de ser solo una cortina de humo para ocultar las violaciones de derechos humanos en Arabia Saudí.

Estrellas como Tiger Woods (al que le ofrecieron entre 700 y 800 millones por irse al LIV Golf) y Rory McIlroy se opusieron radicalmente a los nuevos vientos llegados desde el desierto, mientras que Rahm, quizá con menos vehemencia, también se situó en la trinchera de los ‘fieles’ al PGA Tour.

«¿Cambiaría el estilo de vida de mi familia si ganara 400 millones? No, no cambiaría nada de nada», comentó Rahm en 2022.

«La verdad es que podría retirarme ahora mismo y podría tener una vida muy feliz sin jugar de nuevo. Nunca jugué al golf por razones monetarias. Juego por mi amor a este deporte y quiero jugar contra los mejores del mundo. Siempre he estado interesado en la historia y el legado del golf y ahora mismo el PGA Tour tiene eso», argumentó entonces.

El último giro en esta montaña rusa entre el LIV Golf y el PGA Tour fue el absolutamente inesperado anuncio en junio de un principio de acuerdo –también con el DP World Tour– para enterrar su guerra y unificar el golf a escala mundial.

Ese acercamiento, gestionado bajo el máximo secreto y sin que lo supieran los jugadores del PGA Tour, incluía la creación de una nueva entidad, la gestión de un calendario conjunto, el cierre de todas las causas legales pendientes y la intención de que los jugadores del LIV Golf pudieran recuperar su afiliación a los circuitos ‘tradicionales’.

Sin embargo, no está todo dicho en este matrimonio de conveniencia, ya que la fecha límite para ejecutar este acuerdo es el 31 de diciembre y las negociaciones todavía no se han cerrado.