Oskar Ollakarizketa y Richard Sánchez-Arévalo recorrerán el próximo marzo y durante ocho días los 613 kilómetros de la Cape Epic, prueba de mountain bike por tierras sudafricanas considerada la más dura del mundo (16.000 metros de desnivel), con un fin solidario.

En concreto, ambos ciclistas navarros esperan recaudar 20.000 euros –ya han conseguido casi 4.000– para la Asociación Navarra de ELA (ANELA), mediante la compra simbólica de "kELÁmetros", al precio de 10 euros para las personas físicas y 100 para las empresas.

Dichas donaciones se pueden realizar hasta el próximo 24 de marzo a través de la web https://kelametrosolidario.com e irán destinadas a mejorar la calidad de vida de las personas afectadas a través de diversos servicios y apoyar diferentes proyectos de investigación.

Todas las personas donantes entrarán en un sorteo que se celebrará en abril, con regalos como un viaje en avioneta, estancias en hoteles, equipaciones de equipos profesionales de ciclismo, restauración y lotes de productos.

Se trata de la segunda edición de este proyecto, pues Ollkarizketa ya participó el año pasado en la Titan Desert, que se disputa en Marruecos, obteniendo 16.000 euros para ANELA.

Este ciclista ha asegurado que «queremos convertir los 613 kilómetros de la prueba en donaciones para ayudar a los afectados de ELA a hacer frente a los gastos que esta enfermedad conlleva, pero, sobre todo, para dar visibilidad a esta enfermedad y llevar más lejos aún su principal reivindicación: Ley ELA ya».

Por su parte, Sánchez-Arévalo también puso su granito de arena en una causa solidaria anterior, tomando parte en la carrera marroquí de 2021 con un equipo de Aspace y una bicicleta tándem, junto con una persona con discapacidad.

«Recibí un mensaje de Oskar, preguntándome cuántos años tenía y, sin saber nada más, le respondí: ¿En qué estás pensando, que te conozco? A lo que me propongas, digo sí», ha relatado.

Apoyo de Juan Carlos Unzué

El exfutbolista y extécnico Juan Carlos Unzué ha estado presente en el acto de presentación para dar su apoyo explícito a la iniciativa. El de Orkoien ya tomó parte hace diez, junto a Luis Enrique, en la Cape Epic y ha dado fe de su «dureza».

Ha recordado los costes que supone esta enfermedad, que requiere de la ayuda de hasta cuatro cuidadores en su etapa más avanzada, algo que no pueden permitirse el 95% de las personas afectadas.

Una vez más, ha vuelto a reclamar la puesta en marcha de la denominada Ley ELA, paralizada por los sucesivos cambios de gobierno estatales y que todavía no ha visto la luz, con el objetivo de garantizar una mejor vida para el colectivo de enfermos.