Ramón Sola

Un acuerdo entre el Gobierno de Sánchez y el PNV suaviza el impuesto a las energéticas

En las medidas de escudo social aprobadas este martes por el Gobierno Sánchez se introducen modificaciones en los impuestos a las energéticas, que tendrán bonificaciones. Además, lo gestionarán Lakua e Iruñea, como había planteado el PNV, que discrepaba de la tasa y «comprendía» a Repsol o Petronor.

La sintonía entre Urkullu e Imaz, en evidencia en este acto de Petronor en octubre pasado en Muskiz.
La sintonía entre Urkullu e Imaz, en evidencia en este acto de Petronor en octubre pasado en Muskiz. (Oskar Matxin Edesa)

El impuesto a los beneficios de la banca y las energéticas que en su día aprobó el Gobierno español tras un acuerdo con EH Bildu queda suavizado ahora tras un pacto del mismo Ejecutivo con el PNV. Ha sido anunciado este miércoles al tiempo que se reunía el Consejo de Ministros para valorar las medidas de «escudo social» que estaban a punto de caducar.

Hay dos modificaciones sustanciales: por un lado, se introducen bonificaciones para reducir la tasa a algunas de estas empresas, lo que lleva a recordar que Petronor o Repsol habían lanzado amenazas de retirar inversiones en el Estado español, y por otro la formación jelkide ha logrado que sean las instituciones vascas las que gestionan estos impuestos, lo que resulta llamativo si se recuerda que el PNV no votó a favor.

El Gobierno de Pedro Sánchez y el PNV han acordado en concreto integrar los gravámenes a la banca y a las energéticas en el régimen foral. Se trata de una petición que la formación vasca ya hizo antes de la investidura de Pedro Sánchez y que habrá que ver si no se traduce en ajustes a la baja, viendo su posición contraria a la actual tasa.

Junto al traspaso de estos tributos, también se ha llegado a un acuerdo para crear un «incentivo» para el sector energético por las inversiones estratégicas que se realicen ante la posibilidad de una «ralentización» del gasto en transición ecológica. Cabe recordar que este ha sido un mensaje trasladado reiteradamente, antes incluso de la introducción de ese impuesto extraordinario, por el expresidente del PNV y ahora CEO de Repsol, Josu Jon Imaz.

Imaz se ha convertido en punta de lanza contra este impuesto en los últimos meses, y el PNV se ha mostrado muy comprensivo con sus posiciones o con las del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.

De hecho, en febrero del pasado año el PNV justificó el recurso de algunas empresas para intentar paralizarlo en los tribunales. Para el portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, era algo que «estaba cantado».

Sobre esta rebaja, a la espera de la letra pequeña Pedro Sánchez ha explicado que se van a introducir modificaciones en la ley general de presupuestos para que se puedan deducir desde el 1 de enero las inversiones estratégicas vinculadas con proyectos industriales y con la descarbonización del sistema productivo.

Tras esta dulcificación del impuesto, el consejero de Economía de Lakua, Pedro Azpiazu, ha destacado las inversiones de Petronor en la CAV como «muy importantes» y ha deseado que continúen en los mismos términos.

Luego ha matizado que desconoce qué decisiones tomará «en función de la situación de la tributación. No tengo mucho más que decir, sería entrar en un terreno especulativo que no corresponde».

¿Permanente?

Queda ahora ver si el Gobierno español también hará permanente este impuesto, en principio establecido como temporal. Es una reivindicación reiterada desde EH Bildu especialmente.

En su comparecencia ha abierto la puerta a ello el presidente español. Pedro Sánchez ha señalado el compromiso de la revisión en el año 2024 de esta figura tributaria «que pasará ya a contar con un carácter permanente».

«El impuesto fue diseñado con una pervivencia de dos años, vencería el 31 de diciembre de este año y por tanto lo que hemos hecho ha sido garantizar su pervivencia a partir del año 2024, una vez ya revisada», ha explicado el jefe del Ejecutivo.

Esteban: facilitará la inversión de Petronor

En declaraciones a Radio Euskadi, el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, se ha mostrado «satisfecho» con el acuerdo alcanzado para integrar los gravámenes a banca y energéticas en el régimen foral, y para que en los Presupuestos Generales de 2024 se cree un incentivo por las inversiones estratégicas que realice el sector energético, porque, en su opinión, va a facilitar la inversión prevista de Petronor y de «muchas empresas más».

Esteban ha recordado su reclamación al Ejecutivo Sánchez de que había que incentivar las inversiones, «porque estamos en un momento en el que precisamente los fondos europeos son también para eso». Ha negado que los incentivos por inversiones estratégicas sean un «regalo fiscal», y ha dicho que de lo que se trata es de «saber gobernar».

EH Bildu pregunta por el «incentivo»

La portavoz del grupo parlamentario de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, espera que se aclare «qué es el incentivo para el sector energético» acordado por Sánchez con el PNV.

Entrevista en la Cadena SER-Euskadi, la representante de EH Bildu ha precisado que no se ha aclarado en qué consiste ese incentivo. «Viniendo del PNV y conociendo su recorrido de proteger los intereses de Repsol e Iberdrola, esperemos que lo anunciado no se quede en eso», ha manifestado

Aizpurua ha considerado que las medidas anticrisis que se han prorrogado hoy «se deben mantener y son necesarias. Desde el sentido común, naturalmente se deben aprobar. El no aprobarlos dice bastante poco de la responsabilidad política y social que tenemos cada grupo en el Congreso», ha subrayado.

A su juicio, «muchas de estas medidas tienen que ser estructurales», como las de las calderas comunes. En todo caso, ha apuntado que «se necesita un decreto que regule esto, porque no es igual una industria que una vivienda».

«Esas medidas van a ser necesarias prorrogarlas y convertirlas en estructurales, porque los problemas que hay en la sociedad son estructurales. Vamos poniendo parches, pero hay que tener en cuenta que la situación de mucha gente va a ser igual dentro de seis meses o un año. Es necesario que siga habiendo una protección», ha insistido.