Osasuna cuenta con una importante ventaja para plantarse una vez más en la final de la fase de ascenso a la Liga F. El 0-3 cosechado en la ida frente al Alhama debe ser suficiente ventaja como para confirmarlo en la vuelta ante su público.
Solo un exceso de confianza podría hacer peligrar la materialización de dicho pase, aunque la trayectoria de los últimos años de la escuadra navarra en este tipo de eliminatorias hace que esté con las orejas tiesas para evitar un nuevo disgusto.
En su beneplácito está que las rojillas le tienen tomada la medida al cuadro murciano, al que también vencieron en los dos compromisos ligueros disputados esta temporada (2-1 y 0-1), pero confianzas, las justas.
Será clave que el equipo conserve la tensión competitiva que ha venido mostrando durante toda la segunda vuelta, no solo para impedir la remontada de su rival, sino también para mantener ese espíritu en la futura final, donde podría medirse al Espanyol, que venció al AEM por 0-2.
Para no poner el carro delante de los bueyes, es bueno recordar que el 0-3 de la ida es un tanto engañoso, pues la igualdad entre ambos conjuntos fue máxima durante gran parte del choque, que solo acabó por romperse definitivamente en el último cuarto de hora.
Se espera lleno en el campo principal de Tajonar para llevar en volandas al cuadro navarro, que protagonizará su sexto intento de ascenso, después de buscarlo en la 2018/2019, 2019/20, 2020/21, 2021/22, 2022/23.
«Más tranquilidad que ventaja»
El técnico osasunista, Josu Domínguez, ha considerado que el 0-3 de la ida da «cierta tranquilidad» para afrontar la vuelta ante un rival «complicado», pero al que encaran con «la misma ilusión» que hace unos días.
Además, ve a su plantel «más tranquilo», ya que afrontar la «complicada» empresa del ascenso una vez más había añadido «un nerviosismo excesivo» al grupo, que sabe que tiene que seguir siendo «constante», un equipo «de rodillo, de pico y pala».
«Sabíamos que la clave para afrontar esta eliminatoria era ser un equipo sólido, constante y difícil de batir. Y así tiene que seguir siendo para este segundo partido y para lo que pueda venir», ha señalado.
Con la idea de restar presión, Domínguez ha apuntado que el objetivo como equipo es «seguir creciendo y gestionar las emociones para afrontar este tipo de partidos, tanto en las fases en las que dominas, como en las que te dominan».
Ha destacado, además, que los encuentros los deben afrontar como partes de 45 minutos «para que no se nos haga bola cada partido o eliminatoria», además de contar con jugadoras «con golpeos excepcionales».
Precisamente la autora del primer gol en tierras murcianas, Carmen Sobrón, ha indicado la labor psicológica del entrenador «que nos dijo que era momento de disfrutar, de hacer lo que sabemos hacer, y ahí se nos quitó un peso de encima».
«Hemos hecho una segunda vuelta impoluta, pero algunos resultados adversos nos han venido muy bien para bajar y poner los pies en la tierra. Precisamente por eso vamos a salir ante el Alhama sin confiarnos», ha concluido.