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Las protestas contra Israel marcan la final de Eurovisión

Tras horas de incertidumbre, ha comenzado en Malmö la final de Eurovisión, marcada por las protestas contra la participación de Israel. Alessandra Mele ha renunciado a otorgar los puntos en nombre de Noruega: «Hay un genocidio en marcha y os pido a que, por favor, abráis los ojos y el corazón».

Imagen de la manifestación celebrada en Malmö.
Imagen de la manifestación celebrada en Malmö. (Tobias SCHWARZ | AFP)

La final de Eurovisión 2024, probablemente la edición más polémica de su historia por las protestas contra Israel por la invasión de Gaza, ha echado a andar este sábado desde el Malmö Arena de la ciudad sueca.

Unas horas antes, y en virtud de su política de «tolerancia cero hacia los comportamientos inapropiados», la Unión Europea de Radiodifusión (UER) ha descalificado al candidato de Países Bajos, Joost Klein, por un «incidente» con una persona de la producción del certamen que se está investigando.

Poco después llegaba el último ensayo de la final. Los candidatos de Irlanda, Suiza y Grecia no han participado en el desfile inicial de artistas. Bambie Thug, la representante irlandesa, tampoco ha saltado al escenario después en su turno de actuación.

«Se ha producido una situación mientras esperábamos para saltar al escenario y participar en el desfile de artistas, por lo que requerí la atención urgente de la UER. Esta se ha tomado este asunto en serio y hemos discutido qué acción emprender», ha explicado la artista en sus redes sociales.

Todo esto se une a la reclamación que RTVE realizó en la víspera para que la UER vele por el respeto a la libertad de prensa y opinión tras el acoso que un periodista recibió de parte de colegas israelíes por gritar «Palestina libre» durante otro ensayo.

La presencia de Israel en Eurovisión 2024 en medio de su cruenta ofensiva contra Gaza ha condicionado desde hace meses la celebración del un festival que se proclama apolítico, pero que no dudo al expulsar a Rusia hace dos años del por su intervención militar en Ucrania.

Múltiples voces han pedido insistentemente en los últimos meses que Israel no participe. Sin embargo, la UER ratificó el derecho de la televisión israelí a participar al «cumplir todas las reglas» como miembro de esta organización y como servicio público.

Renuncias a dar los votos

Cabe señalar que la portavoz de los votos de Noruega, Alessandra Mele (que fue a Eurovisión en 2023), ha renunciado a otorgar los puntos. En un vídeo en Instagram ha señalado que ‘Unidos por la música’ «son solo palabras vacías»: «Hay un genocidio en marcha y os pido a todos que, por favor, abráis los ojos y el corazón. Dejad que el amor os lleve a la verdad. Está justo en frente de vosotros. Palestina libre».

El representante de Finlandia en Eurovisión 2023, Käärijä, también ha renunciado a presentar los votos de su país en la final de esta noche porque «no parece que sea lo correcto».

La representante israelí. (Tobias SCHWARZ/AFP)
La representante israelí. (Tobias SCHWARZ/AFP)

Abucheos durante la actuación

Eden Golan, la representante israelí, ha vuelto a recibir abucheos durante su actuación en la final.

En el primer ensayo general celebrado el pasado miércoles la cantante fue abucheada, lo que motivó una queja de la emisora pública Kan, que organiza la participación de Israel en Eurovisión, ante la UER y ante la emisora pública sueca.

Protestas en Malmö

Este sábado, además, miles de personas han recorrido este sábado las calles de Malmö, ciudad sueca donde se celebra la gala de Eurovisión 2024, para pedir la exclusión de Israel del certamen y el fin de la ofensiva contra Gaza.

Se trata de la segunda movilización masiva en dos días, después de la realizada el pasado jueves antes de que la representante israelí interviniese en la segunda semifinal del concurso, en la que se clasificó para la final.

La protesta ha sido convocada por una plataforma que agrupa a más de sesenta organizaciones suecas bajo el lema ‘Por la paz y por una Palestina libre’, y en ella han participado personas llegadas de varias partes de Suecia y de la vecina Dinamarca, así como grupos de asistentes al festival.

Durante la marcha se han coreado lemas contra el ataque a Gaza, pidiendo el boicot a Israel y contra la Unión Europea de Radiodifusión (UER), organizadora de Eurovisión, por no excluir a la representante israelí.

La marcha ha finalizado con la intervención policial, que ha detenido a varías personas, entre ellas a Greta Thunberg.