El sindicato ELA ha publicado este martes el informe ‘UE: agenda verde oliva y digital al servicio de las empresas transnacionales’, elaborado por OMAL (Observatorio de las Multinacionales en América Latina) en el que se hace un análisis sobre los fondos europeos Next Generation y se alerta de los recortes que tendrán que implementar los Estados receptores.
En la presentación, el economista de OMAL Gonzalo Fernández Ortiz de Zárate ha explicado que los fondos públicos europeos, «lejos de ser unas subvenciones a fondo perdido que vienen de Europa, están condicionados a su devolución (en la parte correspondiente a los créditos) y además obligan a los estados receptores a imponer medidas profundamente antisociales: reformas laborales; recorte de las pensiones; fiscalidad a favor de grandes empresas y fortunas, y límites a la contratación y las políticas públicas».
En esa línea, el secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza, ha detallado que recibir los Fondos Europeos obliga al Gobierno español a imponer recortes del 6,1% en las pensiones a partir de abril de 2025 (unos 11.300 millones de euros anuales). «Quienes aprobaron la reforma de las pensiones trataron de ocultar que estaban imponiendo recortes futuros. Los Fondos Europeos son un mecanismo de intervención de las políticas estatales y se enmarcan dentro de las políticas de austeridad que impone la Unión Europea desde hace mucho tiempo», ha denunciado Lakuntza, quien ha reprochado al PNV y EH Bildu que posibilitasen la reforma de las pensiones en el Congreso español.
Además, el informe elaborado por OMAL revela que los fondos Next Generation «van dirigidos, también en Hego Euskal Herria, a las grandes corporaciones multinacionales, con un peso abrumador de la automoción: Volkswagen, Mercedes, Gestamp, Irizar...».
«Los gobiernos de España, CAPV y Navarra se han volcado en rescatar el sector para salvaguardar sus volúmenes de negocio, obstaculizando de facto la reducción del vehículo privado o el fomento del transporte público», sostiene ELA.
El informe de la OMAL también analiza el reparto de fondos destinado a otros sectores. «Destaca que se destinan ingentes cantidades a engrosar burbujas tecnológicas como el hidrógeno (Petronor en Bizkaia, Acciona en Tudela, etcétera) o a enfocar la energía eólica en una lógica neocolonial y extractivista (generalizando la instalación de grandes parques en régimen de monopolio corporativo)», han explicado en la presentación de hoy.
Por otro lado, ELA ha denunciado la militarización que se está dando en la Unión Europea. «El belicismo está hoy en el centro de la política, más gasto militar a la vez que se recorta el gasto social. Quieren recortar las pensiones para comprar armas, así de simple», ha indicado Lakuntza.
«Combatir el capitalismo verde oliva»
Por ello, ELA considera que «este capitalismo verde oliva y digital debe combatirse con un rearme teórico y una gran movilización por parte de la izquierda política, social y sindical, al tiempo que se impulsen alternativas factibles, dentro y fuera de las instituciones».
«La emancipación de los pueblos de Europa pasa por plantar cara sin ambages a la arquitectura de dominación y explotación que representa hoy la UE. Esta reflexión es más pertinente teniendo en cuenta las elecciones del próximo 9 de junio, que van a determinar la orientación de la Unión Europea en los próximos años», concluye.