La italiana Ilaria Salis, detenida en Hungría desde inicios de 2023 y candidata a las europeas por la Alianza Verdes-Izquierdas, consiguió en la pasada madrugada un escaño en la Parlamento Europeo.
La obtención del escaño, según el abogado de Salis, implicaría su liberación debido a la inmunidad que conlleva.
Salis ha sido cabeza de lista de la coalición Alianza Verde e Izquierda italiana, que ha experimentado un importante auge en el país, hasta el 6,7 % de los votos (por separado, en 2019, los Verdes tuvieron un 2,32 % e Izquierda Italiana un 1,75 %).
La italiana se convertirá así en una de las 52 eurodiputadas del grupo de los Verdes en la Eurocámara, que ha reducido su presencia en 22 escaños con respecto a 2019, cuando obtuvo 74 eurodiputados.
Salis está «muy contenta y conmovida», aseguró el portavoz de Europa Verde, Angelo Bonelli, que mantuvo una llamada telefónica con la activista.
Su elección es «una señal que dice que la política puede ser útil y cambiar la vida de las personas», dijo a los medios Nicola Fratoianni, líder de Izquierda Italiana.
La activista de 39 años y de la ciudad italiana de Monza (norte) estuvo casi un año en prisión preventiva en una penitenciaría de alta seguridad de Hungría acusada de haber agredido junto a otras personas a varios neonazis en unas manifestaciones en febrero de 2023.
El pasado marzo apareció ante el tribunal de Budapest encadenada de pies y manos lo que suscitó ciertas tensiones diplomáticas con Roma.
El 15 de mayo pasado finalmente Hungría le concedió el arresto domiciliario.