Natxo Matxin
Redactor especializado en deporte. Osasuna

Georgia y la República Checa fían su pase a octavos a la última jornada (1-1)

Tendrán que conseguirlo en la última jornada. Georgia y Chequia han empatado en un duelo con dos estilos diferentes, pero en el que no han resuelto su clasificación para octavos, objetivo que se jugarán en la última jornada.

Con sus paradas, el guardameta del Valencia, Giorgi Mamardashvili, ha impedido la derrota de Georgia.
Con sus paradas, el guardameta del Valencia, Giorgi Mamardashvili, ha impedido la derrota de Georgia. (Axel HEIMKEN | AFP PHOTO)

GEORGIA 1

CHEQUIA 1

Con dos estilos futbolísticos muy diferentes, Georgia y la República Checa han firmado tablas, un resultado que les deja ahora mismo dependiendo de los resultados que cosechen en la última jornada.

El VAR y Mamardashvili han resultado vitales para el punto que ha cosechado la debutante Georgia, que ha sacado mucho jugo a su juego de contragolpe ante una Chequia más elaboradora, pero a la que le ha faltado eficacia en los últimos metros.

La primera parte no ha sido justa con los méritos de unos y otros. Los de Ivan Hasek han puesto mucho de su parte para colocarse por delante en el marcador –ocho disparos a puerta– e incluso lo han hecho, pero el VAR ha resultado crucial para el resultado con el que se ha llegado al descanso.

Mamardashvili ha tenido mucho trabajo prácticamente desde el principio. El guardameta del Valencia, otra de las claves para que mantener su portería a cero, ya ha tenido que emplearse a fondo con una doble parada para el tercer minuto de juego.

Con un juego aéreo superior y movimientos muy rápidos dentro del área, la República Checa ha llevado mucho peligo que, sin embargo, no ha sabido traducirlo en el luminoso.

Así, Hlozek ha puesto por delante a los suyos en el minuto 23, pero el videoarbitraje ha detectado que su último remate con la cara ha acabado finalmente tocando su brazo antes de entrar en las redes.

Aún ha habido tiempo para que Hlozek, que se ha manejado muy bien en las distancias cortas, se sacase un chut duro, pero centrado, que ha blocado bien colocado Mamardashvili rozando la media hora de juego.

De ese tramo de acoso checo se ha acabado zafando una Georgia que se ha estirado en el último cuarto de hora y ha forzado una falta lateral de la que ha llegado el 1-0. Kashia, con un gran control, ha rematado casi a bocajarro, pero Stanek ha sacado con el cuerpo.

Parecía que iba a ser el último lance antes de retirarse ambos conjuntos a vestuarios, pero el VAR ha llamado a consultas a Siebert, pues en el envío de dicha falta, Hranac ha tocado el cuero con la mano y finalmente se ha decretado penalti.

Mikautadze, delantero que ha firmado una gran campaña en el Metz, ha sido el encargado de transformar la pena máxima de manera muy solvente, engañando al cancerbero del Slavia de Praga pasados cuatro minutos del descuento.

Todavía ha dado tiempo a otra jugada que ha podido cambiar el curso del partido. Chequia ha reaccionado de manera inmediata y esta vez Schick se han encontrado con un balón ideal para rematar con la izquierda, pero Mamardashvili ha firmado una nueva parada de gran mérito.

Lesión de Schick

Tras el paso por vestuarios, el duelo ha entrado en un toma y daca impulsado por la necesidad de Chequia de igualar la contienda y una Georgia que, a la contra, ha buscado certificar su primer triunfo en una Eurocopa.

Ha podido hacerlo Mekvabishvili en una gran salida conducida por Kvaratskhelia (m.57), pero ha cruzado demasiado en su intentona con un tiro bien cubierto el marco por Stanek.

Hasek ha realizado un doble cambio, quizás un tanto sorprendente por los jugadores que ha retirado, pero la variación le ha dado rédito inmediato. Lingr, que ha entrado por Cerny, ha rematado de cabeza un corner que ha golpeado en el segundo palo, donde el goleador Schick solo ha tenido que empujar con el pecho a las mallas en el 59.

Chequia ha recibido la recompensa a su esfuerzo, que ha podido ser mayor con otro posterior testarazo del que será central del Girona Ladislav Krejci (m.62) y un zurdazo de Matej Jurasek (m.66) que ha abortado una nueva intervención de Mamardashvili.

La República Checa no ha cejado en su idea de remontar, pero se ha encontrado con un serio obstáculo, como ha sido la lesión muscular de Schick, que habrá que ver si no han sido sus últimos momentos en el torneo.

En todo caso, ha variado su fórmula para intentar el revolcón, con un fútbol mucho más directo, que ha propiciado una peinada de Chytil (m.76) y un chut seco de Lingr, que ha sacado con el cuerpo el muro Mamardashvili (m.77).

La labor checa no ha tenido premio, pero ha podido ser peor, porque se ha volcado tanto que en el último suspiro del envite ha permitido una contra de tres contra uno de Georgia que Lobzhanidze ha mandado por encima del travesaño cuando tenía toda la portería para él (m.96).

Ficha técnica:

Georgia: Mamardashvili, Kakabadze, Kverkveliya (Gvelesiani, m.83), Kashia, Dvali, Tsitaishvili (Lochoshvili, m.62), Kochorashvili, Mekvabishvili, Davitashvili (Chakvetadze, m.62), Kvaratskhelia (Lobzhanidze, m.83) y Mikautadze (Kvilitaia, m.88).

Chequia: Stanek, Coufal, Holes, Hranac, Krejci, D. Jurasek (Sevcik, m.82), Soucek, Provod (Barak, m.82), Cerny (Lingr, m.55), Hlozek (M. Jurasek, m.55) y Schick (Chytil, m.68).

Goles: 1-0, m.45+4: Mikautadze, de penalti. 1-1, m..59: Schick.

Árbitro: Daniel Siebert (alemán). Ha amonestado a Coufal (m.18), Kashia (m.36), Provod (m.40), D. Jurasek (m.47), Holes (m.53), Soucek (m.81), Gvelesiani (m.82), Mekvabishvili (m.83) y Kochorashvili (m.95).

Incidencias: 46.524 espectadores en el Volksparkstadion de Hamburgo.