Como ya se adelantó el martes, una investigación ha hallado centenares de indicios y evidencias de infraestructuras y edificios de cronología romana en Iruña-Veleia, aunque puede que haya edificaciones de otros tiempos. Lo más destacable es un circo romano de 280 metros de largo y 72 de ancho.
Es un trabajo en curso y todavía queda pendiente realizar una «labor intensa» de categorización y de investigación sobre el propio terreno, con un equipo «adecuado» y «multidisciplinar», según han apuntado. Lo hallado hasta ahora da pie a determinar cómo actuar a partir de ahora en el yacimiento.
Así lo han explicado este miércoles los responsables del hallazgo, los hermanos Javier e Iker Ordoño, de Arkikus, en una rueda de prensa. Han estado acompañados por Javier Fernández Bordegarai, jefe del Servicio de Museos y Arqueología de la Diputación de Araba; la diputada de Cultura y Deporte, Ana del Val; y el viceconsejero de Cultura de Lakua, Andoni Iturbe.
Javier e Iker Ordoño, arqueólogo y arquitecto respectivamente, han subrayado que, aunque es importante, no hay que quedarse solamente con el «posible circo», porque «es solo una parte más» de una posible organización espacial de las manzanas, espacios de culto colectivo, residencias privadas nobles, plazas y calles porticadas, entre otros elementos.
«A fuego lento»
Aunque es un trabajo todavía en curso, empezó en 2020 y se ha estado «cociendo a fuego lento», según ha advertido Iker Ordoño. Fue él quien, trabajando en otro proyecto relacionado con la divulgación sobre yacimiento entre Tresponde y Billoda, descubrió uno de los laterales de lo que después se ha identificado como un circo romano.
A pesar de la incredulidad inicial de su hermano, compararon ortofotos históricas, imágenes obtenidas con el sistema LiDAR, que determina la distancia desde un emisor láser a una superficie, y fotografías y vídeos sacados con un dron. Han detectado centenares de posibles estructuras, de las cuales la gran mayoría está en la zona protegida, sobre una superficie de 251 hectáreas.
Para poder identificar los restos de estructuras enterrados después de siglos, se han fijado en el crecimiento diferencial de los cultivos que, si la tierra tiene menos nutrientes, crecen menos, han explicado los hermanos Ordoño.
18 en la península
En la península ibérica solo hay 18 circos romanos, y cuando se confirme el de Iruña-Veleia será el tercero conocido en la mitad norte de esta. Los otros dos, y para hacerse una idea de la relevancia de Iruña-Veleia, son el de Tarraco (capital provincial de la Hispania citerior, actual Tarragona), que se encuentra debajo de la ciudad, y el de Calagurris (ciudad con rango de municipium, actual Calahorra), el único que conserva su trazado original.
Por su parte, Fernández Bordegarai ha dejado claro que lo importante no es excavar los restos, sino estudiarlos, trabajar en publicaciones y divulgar. «No hay ningún circo en la península que se haya excavado por completo, no merece la pena», ha añadido, «porque la excavación arqueológica siempre es destructiva».
Todo lo que está por confirmar e investigar «tiene un potencial enorme» y es «una joya por descubrir», ha dicho Javier Ordoño. Ha recalcado que, a pesar de que «ya sabíamos» las dimensiones del yacimiento, «esto nos permite ir más allá» y «estamos ante el inicio de una bonita historia».