La secretaría general de la ONU ha elaborado un detallado y crítico informe contra las sanciones de EEUU a Cuba, cuya ilegalidad se debate nuevamente este martes en la Asamblea General, que emitirá el miércoles una resolución para la que se prevé un apoyo casi unánime, aunque tendrá escasas consecuencias.
Se trata de la trigésima segunda ocasión en la que Cuba presenta esta resolución, que cada vez cosecha más apoyos contra el paquete de sanciones económicas estadounidenses que se prolonga ya 62 años.
La Asamblea había pedido a la secretaría generar que preparara un informe consultando a países miembtrs y órganos del sistema de Naciones Unidas sobre esa resolución titulada ‘Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba’.
El reporte final, que ha sido confeccionado durante todo este año, incluye respuestas contundentes contra el bloqueo de EEUU a Cuba por parte de más de 180 países y 35 instituciones internacionales, entre ellas Unicef, el Programa Mundial de Alimentos de la ONU, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo o la Organización Mundial de la Salud.
La resolución, cuyo debate en la asamblea general abarcará martes y miércoles -cuando se prevé la votación de la misma-, se reafirma en «la igualdad soberana de los Estados, la no intervención y no injerencia en asuntos internos y la libertad de comercio y navegación internacionales».
Cuba espera un resultado muy similar al de 2023, cuando solo votaron en contra Estados Unidos e Israel y se abstuvo Ucrania
El Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) de Cuba ha indicado a Efe que espera lograr este año un resultado «muy similar» al de 2023, en el que consiguió 187 votos favorables, solo dos en contra (Estados Unidos e Israel) y una abstención (Ucrania).
La delegación de Rusia, que también ha vertido sus comentarios en el informe de la secretaría general, ha tomado la palabra durante la primera sesión del debate en la asamblea general para definir la política estadounidense en Cuba como «un vestigio de la Guerra Fría».
«Se trata de una muestra muy clara de neocolonialismo por parte de Estados Unidos. Afecta a Cuba y a los 200 estados que desean tejer relaciones comerciales con Cuba», ha asegurado este martes en su discurso el representante ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia.
Una postura con la que han coincidido delegaciones latinoamericanas como la brasileña -en representación del Grupo de los 77 y China- así como la Mexicana, entre otras.
«Es un bloqueo que concentra el sistema de medidas coercitivas y unilaterales más injusto, severo y prolongado contra país alguno en la historia moderna», han afirmado desde la delegación de Venezuela, yendo un paso más allá e su crítica a la «mentalidad supremacista» de EEUU.
Desde 1962
Washington decretó las primeras sanciones contra Cuba en 1959, al poco del triunfo de la revolución en la isla, pero el primer gran bloque de medidas llegó en 1962, bajo el presidente John F. Kennedy. Desde entonces se han ampliado e intensificado en varias ocasiones, como con la ley Helms-Burton (1996) o las 240 medidas de la administración Trump (2017-2021). El gobierno de Joe Biden prácticamente ha mantenido las medidas de Trump.
Cuba sufre escasez de alimentos, medicinas y combustible; prolongados apagones diarios; inflación galopante; dolarización creciente y deterioro de servicios estatales como la educación y la sanidad.