NAIZ
CIUDAD DE GAZA

El Ejército israelí amplía su incursión y avanza sobre la ciudad de Gaza

Las tropas israelíes intensificaron ayer sus operaciones sobre la Franja, sumando decenas de muertos en las últimas horas, y extendieron su incursión terrestre al avanzar sobre la ciudad de Gaza mientras los suministros se agotan.

Residentes de Shujaiya abandonan el barrio tras la orden de evacuación isrelí.
Residentes de Shujaiya abandonan el barrio tras la orden de evacuación isrelí. (H. ZIMMO | CONTACTO)

Menos de 48 horas después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometiera intensificar la presión militar sobre Hamas para lograr la liberación de los prisioneros israelíes que siguen en la Franja de Gaza y de que su ministro de Defensa, Israel Katz, anunciara la ampliación de la ofensiva militar para «apoderarse de grandes áreas» y la «evacuación a gran escala» de la población, el Ejército israelí lanzó una nueva ofensiva terrestre en la ciudad de Gaza.

Las tropas israelíes extendieron su incursión en el barrio de Shujaiya (este) con el fin de ampliar «la zona de seguridad». El Ejército ordenó más expulsiones de los barrios del sur de la ciudad y recurrió a su argumentario habitual al señalar que sus soldados «eliminaron a numerosos terroristas y desmantelaron infraestructuras terroristas de Hamas», y permitieron «la evacuación de civiles».

Pero, en Shujaiya, Elena Helles contó a AFP que, como otros residentes, no podía salir de casa. «Estoy atrapada con mi familia en casa de mi hermana. El Ejército de ocupación está muy cerca. Los proyectiles y misiles caen sobre las casas y las tiendas (de los desplazados). La muerte nos amenaza por todas partes», declaró.

Según el último balance de las autoridades de Gaza, Israel ha matado a 50.609 personas, la mayoría civiles y en torno al 70% de ellas menores y mujeres, y ha herido a 115.063 más. La Oficina de Medios del Gobierno eleva la cifra a más de 61.700, ya que miles de personas siguen bajo los escombros.

Desde la ruptura de la tregua el 18 de marzo por Israel, sus tropas matan o hieren a 100 menores cada día, según Unicef.

Ayer, mató a al menos 38 palestinos. Fuentes médicas del hospital Nasser indicaron que un solo ataque aéreo acabó con la vida de 25 personas en Jan Yunis (sur), la mayoría mujeres y niños, aunque podría haber más víctimas bajo los escombros del edificio bombardeado de madrugada sin previo aviso.

Las Brigadas Ezzedin al-Qassam, advirtieron a Israel de que su ofensiva crea una situación «extremadamente peligrosa» para los cautivos. «La mitad de los prisioneros enemigos vivos está en las zonas donde el Ejército de ocupación pidió evacuar estos días», dijo su portavoz, Abu Obeida.

En la Franja, donde en las dos últimas semanas más de 280.000 personas han sido desplazadas por la fuerza, no hay refugio, mientras la principal ciudad sitiada del norte, Gaza, ya no puede suministrar agua potable. Y en el enclave se agotan las reservas de alimentos por el bloqueo israelí.

Los palestinos volvieron a apelar a la comunidad internacional para que detenga el derramamiento de sangre, mienteas el Consejo de Derechos Humanos de la ONU adoptaba sendas resoluciones para reafirmar la ilegalidad de la ocupación de Cisjordania y apoyar el derecho del pueblo palestino a la autodeterminación y a decidir su destino.



Bélgica actuaría como Hungría con Netanyahu

El primer ministro belga, el nacionalista flamenco Bart De Wever, apeló ayer a la para justificar la negativa del Gobierno de Hungría de no detener a su homólogo israelí, Benjamin Netanyahu, sobre quien pesa una orden de arresto del Tribunal Penal Internacional (TPI) por crímenes de guerra y de lesa humanidad en el marco de su ofensiva militar en Gaza, y dio a entender que él y el resto de Estados de la Unión Europea habrían hecho lo mismo. Las palabras de De Wever, que denunció la decisión de Budapest de retirarse del TPI, suponen un giro respecto a la posición del anterior Gobierno belga del liberal flamenco Alexander de Croo, quien en noviembre dijo que si Netanyahu viajara a Bélgica el país «asumiría sus responsabilidades» y sería arrestado.

Mientras, en la segunda jornada de su visita a Hungría, Netanyahu recibió el título de «civis universitatis honoris causa» (ciudadano ) de la Universidad Nacional de Servicio Público (NKE, creada por el Gobierno de Orban en 2012. La distinción se ofrece a personas con destacados logros en administración pública, orden público, defensa y vida pública.