Podemos abandona la negociación con el PSOE tras el acuerdo entre Sánchez y Rivera

«El acuerdo está pensado en el PP. Por desgracia no lo hemos conseguido por el momento». Iñigo Errejón, acompañado del equipo de negociación de Podemos, ha comparecido en el Congreso para anunciar que abandonan el diálogo con el PSOE después de que Pedro Sánchez haya presentado un documento de acuerdo con Albert Rivera.

El acuerdo entre PSOE y Ciudadanos ha sido la gota que ha colmado el vaso dentro de un proceso en el que Pedro Sánchez jugaba a dos bandas pero ponía más énfasis en acordar con Albert Rivera. Finalmente, Podemos se levanta de la mesa, aunque deja abierta la posibilidad de volver a hablar cuando la investidura del candidato fracase. Una opción que, a día de hoy, es la que más posibilidades tiene, a no ser que el PP termine por abstenerse. «Con esta elección se ha frustrado por el momento una oportunidad histórica. El PSOE ha manifestado que quiere figurantes y no socios. El PSOE no quiere gobernar con nosotros y poner en práctica políticas al servicio de la mayoría y ha realizado una elección incompatible», ha asegurado Errejón, que ha comparecido junto a su equipo negociador, todos ellos con rostros serios y preocupados.

«Es un texto ideado para el Ibex 35», ha argumentado el «número dos» de Podemos, considerando que lo único que puede hacer presidente a Sánchez es la abstención del PP. «Si el PP no se abstiene es una investidura fallida», ha asegurado. «No se puede mantener la ficción de que uno puede ir en dos direcciones opuestas. Hay que elegir. Con pesar decimos que Sánchez ha elegido», ha insistido. A pesar de que el relato acordado por PSOE y Ciudadanos quiere reforzar el veto al referéndum catalán como motivo de la ruptura, Errejón no lo ha mencionado en primera instancia. En su lugar, ha hablado de la ausencia de voluntad para derogar la reforma laboral, la inclusión del complemento salarial para sueldos más bajos («subvenciona los peores salarios», ha afirmado), la no inclusión de una reforma electoral y que no se derogue la Ley Mordaza, entre otros puntos que aparecen en el documento presentado esta mañana.

«Ayer dijimos que habíamos estado trabajando en política económica y se habían producido avances pero lentos. Hoy sabemos por qué eran tan lentos», ha asegurado, denunciando que mientras el equipo de Sánchez escenificaba el intento de acuerdo junto a Podemos, Compromís y Unidad Popular, «en la habitación de al lado» se encontraba su responsable económico, Luis Garicano, pactando un programa económico «que hace las delicias de FAES»

Poco después de que Errejón diese la rueda de prensa, Unidad Popular ha remitido un comunicado en el que anunciaba que también se levanta de la mesa. Solo podrá retomarse el diálogo en caso de que el PSOE renuncie al acuerdo firmado con Ciudadanos. Una opción que podría plantearse si Sánchez pierde las dos investiduras. No obstante, después de la escenificación de los últimos días, es evidente que la preferencia de Ferraz está en Rivera y, quién sabe, si también en el PP. 

Con el pacto, Sánchez fía su investidura al PP. Y los mensajes que llegan desde Génova no son alentadores. Así que a partir del día 5 se abriría otro período en el que el candidato del PSOE ya no sería el ungido por el jefe del Estado, Felipe de Borbón, sino que podría abrirse otra ronda de consultas y una nueva nominación. Por ahora, lo que sí se rompe es esa regla no escrita que decía que nadie podía levantarse de la mesa aún en el caso en el que las condiciones objetivas para el acuerdo no existiesen. Habrá que ver si se impone el relato de la «intransigencia» de Podemos o de la incompatibilidad de un documento que, según Rivera, «incluye el 80% de las propuestas de Ciudadanos».